A pesar de no ser nada sencillo de explicar, este proceso es completamente obra de la madre naturaleza. Todo sucede con principios básicos, cuando un objeto se mueve a través de un fluido las moléculas tienden a permanecer en contacto con el objeto debido al efecto Coandă.
¿Efecto Coandă? El desplazamiento de esta masa de aire hacia abajo produce una fuerza que es contrarrestada por otra fuerza producida por la Ley de acción y reacción, y esta fuerza que empuja hacia arriba es la responsable fundamental de que un avión vuele.
Además del ángulo, la cantidad de aire desplazado depende también de la velocidad del avión, por eso cuanto más lento va a un avión mayor tiene que ser el ángulo de ataque. Conclusión, para usar el aire como medio generador de fuerzas para que vuelen los aviones hay que trabajar con velocidades elevadas.
El ala del avión al volar tiene una superficie por arriba, extradós, y por abajo, intradós. Si el avión está en la pista de despegue con velocidad cero, se encuentra a presión ambiente. Sin embargo, la interacción entre la velocidad y la presión logran levantar, incluso, a la más pesada de las máquinas.