Rarámuris, wajirós, pimas y tepehuanos podrán decidir sobre la realización o no de proyectos de infraestructura que impacten su forma de vida
Chihuahua, Chih. – Los pueblos originales de Chihuahua, y de todos los estados de la República Mexicana, decidirán la realización o no de proyectos que tengan un impacto en su forma de vida y entorno, luego que la Cámara de Diputados aprobó la Ley General de Consulta de Pueblos Indígenas y Afro mexicanos, declaró el diputado federal y promotor de esa iniciativa, Ulises García Soto.
Bajo esta normatividad, explicó, los integrantes de las comunidades indígenas que habitan en el territorio chihuahuense: rarámuri, wajiró, pima y tepehuano, deberán ser consultadas antes de que se realice cualquier proyecto de infraestructura o de otra índole que los afecte de alguna forma para decidir su viabilidad.
“Estoy muy contento porque el día de ayer votamos un tema de gran importancia para la Cuarta Transformación, estoy orgulloso de haber sido parte fundamental en la elaboración y aprobación de la Ley General de Consulta de Pueblos Indígenas y Afro mexicanos”, declaró.
Recordó que hace aproximadamente dos meses, el legislador y su equipo organizaron los foros para la consulta de esta iniciativa, que se realizaron a nivel nacional.
A García Soto le correspondió coordinar los esfuerzos para organizar el foro en Chihuahua el pasado 13 de marzo en Guachochi, donde se hizo una consulta a los pueblos rarámuri, wajiró, pima y tepehuano de Chihuahua, así como a la población indígena migrante, sobre todo la que se establece en Ciudad Juárez, donde existe una concentración importante en tránsito.
También asistieron representantes de las comunidades kikapus y mascogos del estado de Coahuila.
El ordenamiento tiene la gran importancia de obligar la consulta a los pueblos originarios acerca de los proyectos de ley y las políticas públicas que los involucran.
García Soto indicó que, además, una parte muy importante es que las resoluciones de estas consultas deberán ser vinculantes para los Poderes de la Unión, lo que significa que si se quiere construir un aeropuerto, un gasoducto, un proyecto minero o una presa en la sierra de Chihuahua, los pueblos indígenas deben ser consultados y si se oponen a la ejecución de esos trabajos, debe prevalecer su decisión.
“Nuestros pueblos son parte de nuestro gran acervo cultural que tenemos cómo nación, Chihuahua y Ciudad Juárez han sido parte fundamental de esta nueva Ley y me llena de mucho orgullo hayamos sido partícipes de esta iniciativa”, estableció el diputado federal.
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