A diferencia de su predecesora, la Sputnik Light —también desarrollada por el Centro de Investigación de Epidemiología y Biotecnología Gamaleya— solo requiere una inyección y contiene un componente creado a base del adenovirus del tipo 26. El fármaco tiene una eficacia del 79,4% desde el día 28 después de su aplicación y es eficaz contra todas las nuevas cepas del coronavirus.
Mientras que Sputnik V crea una respuesta inmune más fuerte y prolongada, Sputnik Light podría usarse para crear rápidamente una inmunidad colectiva en el caso de que la situación epidemiológica empeore, explica el ministro de Sanidad de Rusia, Mijaíl Murashko.
La vacuna también es capaz de incrementar la cantidad de anticuerpos en la sangre, así que también será útil para quienes ya superaron el COVID-19 hace más de seis meses y ahora tienen menos anticuerpos.