Hace 16 años, en el 2005, esta física y política alemana no solo llegó a lo más alto del poder, sino que fue la persona más joven y la primera mujer en ser la canciller federal de Alemania.
Rusia (Sputnik) – Sputnik te cuenta cómo la hija de un simple pastor logró hacerlo.
Angela Dorothea Kasner nació un 17 de julio de 1954 en Hamburgo. Pasó su infancia y adolescencia en la República Democrática Alemana (RDA), a donde su padre, un sacerdote luterano de raíces polacas, fue trasladado poco después de su nacimiento. Después de graduarse en el Instituto de Física de la Universidad de Leipzig, Merkel trabajó como asistente de investigación en el Instituto de Química Física de la Academia de Ciencias de la RDA.
Su carrera política comenzó en 1989 con el opositor partido Despertar Democrático, donde se convirtió en la secretaria del presidente del partido, Wolfgang Schnur. En agosto de 1990, el partido pasó a formar parte de la Unión Demócrata Cristiana (CDU).
Merkel recibió el mandato de diputada del Bundestag en las primeras elecciones alemanas de diciembre de 1990. El entonces canciller, Helmut Kohl, la nombró para el cargo de ministra de Asuntos de la Mujer y la Juventud.
La carrera de Merkel se desarrolló rápidamente: en 1993 se convirtió en presidenta de la CDU de la tierra federal de Mecklenburg-Vorpommern; en 1994 fue ministra federal de Medio Ambiente; en 1998, secretaria general de la CDU; y en 2000, presidenta del partido y del grupo parlamentario en el Bundestag.
Durante sus años como opositora, cuando Gerhard Schroeder era canciller, Merkel logró fortalecer el partido. Como resultado de las elecciones del 2005, el partido de Merkel obtuvo el 35,2% de los votos y el de Schroeder, el 34,4%.
Después de largas negociaciones, Schroeder renunció a sus aspiraciones para el cargo de canciller y, por primera vez en la historia, una mujer encabezó el Gobierno alemán. El 22 de noviembre, el Bundestag aprobó a Angela Merkel como canciller de la República Federal de Alemania y, al mes siguiente, la Sociedad de la Lengua Alemana anunció la palabra kanzlerin (feminitivo de canciller) como la palabra del año.
El primer Gobierno de Merkel logró el objetivo principal: en el 2007, el presupuesto alemán por primera vez desde la reunificación del país pasó a tener un superávit y el desempleo disminuyó. Pero ya en el 2008, Merkel tuvo que hacer frente a la crisis financiera y rescatar no solo a Alemania, sino a toda la UE.
Forbes ha reconocido 10 veces seguidas a Angela Merkel como la mujer más influyente del mundo y The Times la incluyó dos veces en la lista de las 100 personas más influyentes del planeta.
Después de su primer mandato, Angela Merkel encabezó los Gobiernos alemanes en tres ocasiones más: la coalición negra y amarilla con el Partido Demócrata Libre y dos más con el SPD.
Merkel nunca tuvo problemas con la reelección, el pueblo de Alemania confiaba incondicionalmente en ella. En un debate en 2013, Angela Merkel se dirigió a los votantes con las palabras “Tú me conoces”. Y realmente la conocían: Madame Chancellor era predecible y consistente, lo que encajaba completamente con lo que querían los votantes.
Las reformas más notables del Gobierno de Merkel fueron la abolición del servicio militar obligatorio (el Ejército cambió a una forma de contrato y se redujo en número), el abandono de la energía nuclear y la ley sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Durante su vida política, Merkel enfrentó muchos desafíos: la crisis financiera mundial (2008), la crisis migratoria (2015) y la pandemia de coronavirus (2020). Fue la crisis migratoria la que se convirtió en un punto de inflexión en su carrera. Al abrir las fronteras a los refugiados, Madame Chancellor provocó una división tanto dentro del partido como en la sociedad. Según una encuesta de ARD TV, de abril a octubre de 2015, el nivel de confianza del público en Merkel cayó del 75% al 54%.
En las elecciones del 2017, el partido Merkel mostró el peor resultado de la historia con solo el 30,2% de los votos. El 29 de octubre, la canciller anunció que dejaría de postularse para la presidencia de la CDU y, una vez finalizado el período electoral, dejaría la política.
Y Merkel, como siempre, mostró consistencia y previsibilidad. En el 2016, en una entrevista con Der Spiegel, dijo que esperaba sentir el momento en que tenía que dejar la política y que no querría terminar su carrera en el estado de “quiebra”.
El 16 de enero del 2021, en el congreso de la CDU, se eligió un nuevo líder del partido, Armin Laschet, de 59 años.
La autoridad de Alemania en Europa ha crecido significativamente durante la era Merkel. En el 2008, durante la crisis económica, el país asumió un papel de liderazgo en la UE. Según los analistas políticos, esto se logró sobre todo gracias a la delicadeza de Merkel, que combinó una “cultura de moderación” con una “cultura de responsabilidad”.
En agosto del 2021, Merkel visitó Moscú por última vez como canciller alemana. Durante una reunión con el presidente ruso, Vladímir Putin, dijo que Rusia y Alemania tienen desacuerdos, pero que los países “tienen la intención de mantener el contacto”.
Las elecciones parlamentarias en Alemania se celebrarán el próximo 26 de septiembre. El nuevo canciller asumirá el cargo no después de la finalización de la votación, sino después de las negociaciones de coalición sobre la formación de un nuevo Gobierno. Durante todo este tiempo, Angela Merkel seguirá al frente del gabinete.
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