Los resultados oficiales aún no han sido publicados. Dado que los dos candidatos tienen puntos de vista muy diferentes no solo sobre cuestiones internas, sino también sobre el papel de Francia en Europa, la OTAN y el resto del mundo, lo que está en juego en la votación es de alto riesgo. opinan los franceses.

Es posible que la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del domingo se haya decidido en ciudades como Pantin, que no votaron ni por Emmanuel Macron ni por Marine Le Pen en la primera vuelta. En cambio, casi seis de cada 10 votantes respaldaron al candidato de extrema izquierda Jean-Luc Melenchon, quien no respaldó a ninguno de los finalistas para esta segunda ronda… aunque les dijo a sus seguidores que no votaran por Le Pen.

“Creo que tenemos que salvar el país, así que opté por Macron”, dijo Fatime, consultora de marketing de 38 años.

Como a muchos franceses, los dos finalistas la decepcionan.

“No estoy especialmente feliz con Macron y no tan feliz con Le Pen… si Marine gana, tengo miedo de que cause una guerra civil o algo así”, dijo.

Esta fue la segunda vuelta presidencial que enfrenta a Macron contra Le Pen. Pero cuando compitió contra el candidato de extrema derecha hace cinco años, Macron era un recién llegado que prometía cambios. Ahora, es una persona conocida que ha recibido críticas mixtas del electorado por su manejo de temas como el medio ambiente y la economía.

Emmanuel Codjia, residente de Pantin, dice que votó por Le Pen. Dice que hay cosas fundamentales en las que cree, como la cultura y el patrimonio francés y el futuro del país. Codjia dice que esta es la primera vez que vota a la extrema derecha y que no está de acuerdo con toda la plataforma de Le Pen. También dice que no cree que ella sea elegida. Es más un voto, dice, para hacer un punto.

Codjia dice que dado que su familia, proveniente de África Occidental, luchó duro para convertirse en francesa, cree que es importante votar en lugar de abstenerse.

Esta fue la tercera candidatura presidencial de Le Pen. Ha suavizado su imagen, enfatizando los problemas del costo de vida y retrocediendo en posiciones anteriores como un llamado a prohibir los velos musulmanes en los espacios públicos.

Le Pen y Macron ofrecieron posiciones marcadamente diferentes sobre política interior y exterior durante su único debate el miércoles pasado. Le Pen quiere alejarse de las energías renovables y reducir la participación de Francia en organismos como la Unión Europea y la OTAN.

“Voté por nuestro actual presidente, el señor Macron”, dijo la jubilada Benedicte Tardivo. Ella dice que también tiene miedo de una presidencia de Le Pen. Pero también es positiva sobre Macron.

“No soy un experto pero en varios objetivos hizo un muy buen trabajo para que Francia tuviera un lugar importante en el mundo, entre Europa. Nuestra voz se escucha en todo el mundo. Y por Francia tiene que hacer más de lo que hizo durante cinco años. Por todas las diferencias y desigualdades entre las personas… pero… estoy seguro de que podría mejorar y llegar más lejos en su trabajo que hizo hasta ahora”, dijo Jean-Emmanuel Sánchez, residente de Pantin.

No dirá por quién votó, solo que hizo lo que llamó una elección “estratégica”. Describe el mandato de Macron, marcado por crisis como las protestas de los chalecos amarillos por cuestiones económicas, como un período muy violento. Dice Le Pen representa un peligro, siente que no le han dado muchas opciones.

Entonces, el ganador de esta elección enfrenta un camino difícil por delante. Incluso antes de que se cuenten los votos, muchos franceses ya están decepcionados con el resultado.