Alemania indicó el miércoles que proporcionará a Ucrania misiles antiaéreos modernos y sistemas de radar, mientras que Estados Unidos tenía previsto presentar ese día un paquete de armas que incluiría sistemas de cohetes de medio alcance de última tecnología.

Los misiles IRIS-T SLM que enviará Berlín son “los más modernos que tiene Alemania en sistemas de defensa antiaérea”, dijo el canciller del país, Olaf Scholz, a los parlamentarios.

“Con esto, haremos que Ucrania pueda defender toda una ciudad de los ataques aéreos rusos”, señaló. Alemania también proporcionará sistemas de radar para ayudar a localizar la artillería enemiga, añadió.

Las armas occidentales han sido críticas en el éxito de Ucrania a la hora de frenar a un ejército mucho mayor y mejor equipado. Las fuerzas ucranianas frustraron el esfuerzo inicial ruso de tomar la capital y obligaron a Moscú a cambiar de estrategia y centrarse en la región industrial en el este del país, el Donbás.

Pero conforme se alargaba la guerra y Rusia bombardeaba localidades en su milimétrico avance, Ucrania pedía más armas para defenderse. El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, ha acusado en ocasiones a Occidente de lentitud en el envío de armas, y Alemania en particular ha sido señalada por no hacer suficiente.

El paquete estadounidense incluirá helicópteros, sistemas antitanques Javelin, vehículos tácticos y piezas de repuesto, entre otras cosas, según dijeron el martes dos miembros destacados del gobierno. Los dos hablaron bajo condición de anonimato para hacer comentarios antes de la presentación oficial del plan.

Un funcionario señaló que los sistemas avanzados de cohetes darían más precisión a las fuerzas ucranianas para atacar objetivos rusos dentro de Ucrania.

Las fuerzas rusas ya controlan el 70% de Sievierodonetsk, según un gobernador regional. La ciudad es clave en los esfuerzos rusos de tomar las partes del Donbás que aún no controlaban separatistas con apoyo de Moscú.

Los combates callejeros continúan en la ciudad, donde permanecen unas 13.000 personas a pesar de que el 90% de los edificios residenciales están dañados, indicó en declaraciones por escrito a The Associated Press el gobernador de la región de Luhansk, Serhiy Haidai. Decenas de miles han huido de la localidad, donde antes vivían unas 100.000 personas.

Haidai señaló que la única otra ciudad en la región de Luhansk que los rusos no han capturado aún, Lysychansk, está “totalmente” bajo control ucraniano. “Si los rusos logran tomar control pleno de Sievierodonetsk en dos o tres días, empezarán a instalar artillería y morteros y atacarán Lysychansk con más intensidad”, dijo Haidai.

En otro mensaje en Telegram, Haidai dijo que algunas tropas ucranianas se han retirado de Sievierodonetsk.

“La evacuación (de civiles) se ha suspendido. No hay posibilidad de llevar ayuda humanitaria”, añadió.

El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, por su parte, dijo que el país pierde entre 60 y 100 soldados por día en los combates contra las fuerzas rusas, y otros 500 resultan heridos cada día.

En declaraciones a la televisora estadounidense Newsmax, Zelenskyy afirmó que “la situación más complicada está en el este de Ucrania y en el sur de Donetsk y Luhansk”.

En el sur de Ucrania, un gobernador regional dijo que las tropas rusas se están retirando y volando puentes para impedir un posible avance ucraniano. Vitaliy Kim, gobernador de Mykolayiv, dijo el miércoles en la aplicación de mensajería Telegram que Rusia estaba a la defensiva.

“Tienen miedo de un avance (de las Fuerzas Armadas ucranianas)” escribió Kim, que no aclaró donde se estaba produciendo la retirada. Las partes de la región de Mykolayiv que han caído en manos de las fuerzas rusas en los últimos días están cerca de la ciudad de Jersón, ocupada por Moscú.

El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, dijo en su discurso nocturno el martes que los combatientes ucranianos habían tenido “cierto éxito en dirección a Jersón”.