Reconozco la importancia de la información para el desarrollo de nuestras vidas , pero también muchas veces no comprendo el “tipo de información” que más nos atrae y sobre todo la manera en que la procesamos.
En un mundo hiperconectado estar al día es una frase muy antigua, lo de hoy es “estar al minuto”.
Decenas de notas se mastican en la mesa a la hora de la comida , chismes de farándula se beben calientes en los cafés y las antenas de vinilo nos alertan cuando algo nos cimbran con hechos inconmensurables.
Según datos estadísticos la información más trascendental para los mexicanos es la de impacto nacional, la que tiene que ver con el rumbo de la manada, pero un dato curioso es que las noticias que menos nos interesan son las de Nota Roja , aunque en muchos casos lo increíble de los acontecimientos sangrientos mueva el morbo social hasta el punto de convertir la muerte de las personas en un episodio digno de la Rosa de Guadalupe .
México se encuentra en el lugar 12 de los países con mayor consumo de noticias en donde el 56 % de la población accede a por lo menos una noticia al día.
Pero no he escrito estas líneas para hacer un recuento numérico. El tema es un asunto mucho más sencillo.
Tan simple como un camino encendido en las redes sociales por Belinda, que recorre la calle de la infidelidad por Shakira , que pasa por los múlti homicidios en lugares públicos , da vuelta por el problema del agua , topa de frente con las sequías y se detiene en el alto con el asesinato de sacerdotes .
Todas estas informaciones del exterior refuerzan nuestros factores de estrés .
Son alertas que nos activan en modo “guerra” que elevan los niveles de cortisol y que nos enferman despacito… pero letalmente.
¿Y entonces no hay que saber nada de lo qué pasa ? No es justamente la mejor opción , sería igual de patológico trasladarse al otro extremo .
Pero partiendo de que la información ya está ahí en el aire, en la pantalla del celular y en el almuerzo de la oficina sin pedirnos permiso ni consideración de las propias necesidades y frustraciones no queda otra que arar en otras tierras .
“Si el mundo como decía Voltaire no va a cambiar y habrá siempre gente mala , guerras, injusticias y avaricia como consecuencia de la condición humana, lo único que nos queda es trabajar en nuestro jardín interior.”
Si no podemos cuidar a todos los niños del mundo , empecemos siendo mejores padres .
Si me molesta la deshonestidad humana seamos adultos afectivamente y profesionalmente responsables.
Si me indignan la infidelidad seamos fieles .
Si me preocupan los asesinatos seamos cautelosos y respetuosos en cada pérdida.
Empecemos a cultivar nuestros entornos, lo que está cerca . No como una manera egoísta y desinteresada del dolor exterior si no como un antídoto del alma que pueda aligerar el peso de las cosas que duelen pero que no está en mis manos cambiar .
Cultivar el jardín interior es una tarea complicada . Es cuidar todo espacio para que esté limpio y ordenando, es que en la casa se pueda respirar serenidad , que en el trabajo se procure la armonía y que en los clubs sociales se respeten las diferencias .
Cultivar el jardín tiene que ver con una disposición personal de aligerarme la vida y con ello evitar vaciarle a los otros mas pasares .
Tratar con las flores nos dará cada día buenas noticias que nos ayudarán a darle más valor a nuestro contexto haciéndonos más responsables del presente, evitándonos regresar al pasado que nos deprime y dejando de estar ansiosos por el futuro que aún no llega.
Contribuirá a estar mejor y más sanos mentalmente .
Con un jardín interior frondoso y vivo será más eficiente nuestra selección de información, será más productiva la manera de asimilar cada cosa que no está en mis condiciones humanas y profesionales , y por supuesto seremos más felices en el entorno y tiempo que nos sea posible vivir .
Rocío Saenz
Lic. En Comercio Exterior. Lic. En Educación con especialidad en Historia. Docente Educación Básica Media y Media Superior, Fundadora de Renace Mujer A.C. Directora de Renace Mujer Lencería, Consultora socio política de Mujeres.