Un análisis de más de 30 conflictos en África, Asia, Medio Oriente y América Latina revela que los niños continúan siendo los más afectados por la guerra y se ven obligados a soportar lo que describe como “horrores indescriptibles”.

Los autores del último informe del organismo sobre el tema dicen que, en cualquier caso, esta cifra representa solo una fracción de las violaciones que se cree que han ocurrido y no refleja la magnitud de los crímenes cometidos contra los niños atrapados en la guerra.

Tasha Gill, asesora principal de Protección infantil en emergencias de UNICEF, explica que los niños son víctimas de un asombroso promedio de 71 violaciones graves verificadas todos los días. El informe documenta el asesinato y la mutilación de más de 104.000 niños en distintos conflictos.

“Entre 2016 y 2020, el 82% de todas las víctimas infantiles verificadas ocurrieron en solo cinco lugares: Afganistán, Israel y Palestina, Siria, Yemen y Somalia. También es importante tener en cuenta que muchos niños experimentan más de una violación, lo que aumenta su vulnerabilidad”, dijo Gill.

Señala que el secuestro a menudo conduce a otras violaciones, como el reclutamiento y la violencia sexual. El informe ha verificado al menos 25.700 secuestros de niños por parte de las partes en conflicto y más de 93.000 niños reclutados como soldados por todas las partes en conflicto.

Además, el informe señala que los niños han sido violados, casados a la fuerza y explotados sexualmente, con al menos 14.200 niños que también han sido objeto de otras formas de violencia sexual. Gill llama a la violencia sexual contra los niños la menos denunciada de todas las violaciones.

“La violencia sexual sí ocurre contra los niños. Se utiliza como táctica de guerra. Es uno de los números más bajos debido a la cuestión del acceso, pero también al estigma y el miedo asociados con la denuncia en conflictos en todos los ámbitos. Los niños a menudo son utilizados por muchas razones diferentes, que pueden considerarse un ataque deliberado. Nuestra solicitud es que todas las partes cesen de inmediato y desistan de usar niños en conflictos armados”, denuncia Gill.

La experta señala que los niños son reclutados como soldados, y muchos también son utilizados por las partes en conflicto como porteadores, esclavos sexuales y mensajeros. Las violaciones deben parar, exigió.

UNICEF hace un llamado a las partes en conflicto y a los estados para que cumplan con sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario y de derechos humanos e implementen medidas concretas para proteger a los niños.

Los funcionarios de la agencia dicen que han tenido éxito en la prevención de algunas violaciones contra los niños y en detener otras al comprometerse con los responsables de las violaciones. Por ejemplo, en las últimas dos décadas dicen que al menos 170.000 niños han sido liberados de las fuerzas armadas y los grupos armados.