El gobierno federal dijo este martes que no pedirá la pena de muerte contra el hombre acusado de matar a casi dos docenas de personas en un ataque racista en un Walmart de El Paso en 2019.
El Paso, Tx. (ADN/Agencias) – El hombre acusado del mortal tiroteo en el Walmart de El Paso no se enfrentará a la pena de muerte en el caso federal, según una notificación presentada el martes por la Fiscalía del Distrito Oeste de Texas.
“Los Estados Unidos de América por la presente notifica a la Corte y el acusado PATRICK WOOD CRUSIUS que el Gobierno no pedirá la pena de muerte en el presente caso”, dijo la presentación.
Han pasado más de 3 años desde el tiroteo y el sospechoso, Patrick Crusius, aún no ha sido juzgado.
Tanto la fiscalía federal como la defensa propusieron y acordaron la fecha límite del martes y, según los documentos judiciales, la fecha da a ambas partes tiempo suficiente para prepararse para el juicio federal.
El ex fiscal del distrito de El Paso, Jaime Esparza, es el fiscal federal del distrito oeste de Texas.
Tras el tiroteo, el predecesor de Esparza, John Bash, anunció su intención de solicitar la pena de muerte en el caso federal contra Crusius.
“Estamos preparados para esta lucha. Hemos nacido para esta lucha”, dijo Bash durante la rueda de prensa de 2020. “Vamos a pasar a la ofensiva contra quienes cometen delitos de odio”.
Crusius ha sido acusado de varios cargos federales y estatales.
Los documentos judiciales muestran que Crusius se enfrenta a 90 cargos federales:
- 22 cargos de delito de odio con resultado de muerte
- 22 cargos de arma de fuego para cometer asesinato durante y en relación con un delito de violencia
- 23 cargos de delito de odio con tentativa de asesinato
- 23 cargos de uso de arma de fuego durante y en relación con un delito de violencia.
El juicio federal está previsto que comience el 8 de enero de 2024.
Se espera que los fiscales estatales se reúnan con el juez estatal para hablar sobre los plazos y una posible fecha para el juicio después de que se tome una decisión el martes.
Crusius se declaró inocente en el caso estatal en el que los fiscales solicitaron la pena de muerte.
Crusius confesó haber conducido hasta El Paso desde su casa, cerca de Dallas, para atacar a mexicanos, según la policía.
Un total de 23 personas murieron a consecuencia del tiroteo.
El fiscal del distrito de El Paso, Bill Hicks, ofreció una rueda de prensa sobre el futuro del caso.
Dijo que el estado de Texas sigue buscando la pena de muerte y que la Oficina del Fiscal de Distrito sigue comprometida con la búsqueda de justicia para El Paso.
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