Lo que comenzó como un proyecto de la empresa Mattel para competir con la Bild-Lilli alemana, tomó auge rápidamente y se convirtió en un acontecimiento capaz de liderar eventos sociales.
Estados Unidos (VOA) – La expectativa por el estreno de la película ‘Barbie’ ha generado un sinfín de recuerdos, preguntas, análisis y, propio de la época de redes sociales, tendencias y desafíos.
Desde un desafío TikTok por ver quién soporta más tiempo colocar los pies en punta hasta reels de qué vestido ‘Barbie style’ genera más likes, este nuevo filme parece haber calado más allá de ser un, casi milagroso, estreno en tiempos convulsos para Hollywood.
Un poco de historia
El año 1959 ha sonado mucho ultimadamente en las conversaciones diarias, pues es el año en que la muñeca salió al mercado. Lo que fue, en principio, un proyecto de la empresa Mattel para competir con la Bild-Lilli alemana, agarró auge rápidamente y se convirtió en un acontecimiento capaz de liderar eventos sociales, según los expertos.
“Detrás de toda la campaña publicitaria actual, hay un icono de la moda que ha contado la cultura y la historia de parte de la sociedad”, dice la doctora Yorelis Acosta, psicóloga clínica y social.
Y es que Barbie ha estado presente en varios picos y conquistas femeninas, haciendo que los creativos de Mattel se las ingenien para, como decía su campaña hace unos años, “refleje el mundo tal y como se ve hoy día”.
Es así como, tratando de romper con el estereotipo inicial de la mujer rubia, de ojos azules, siempre sonriente con un cuerpo “prácticamente perfecto” y protagonista de un cuento de hadas de la vida real con una casa envidiable y un carro de último modelo, las muñequitas comenzaron a ganar peso, ver el tamaño de sus pechos reducido y cambiar el color de cabello y tez.
Entre los lanzamientos más recordados están el de la primera Barbie negra en 1980, la Barbie morena con aspecto hispano en 1987 o muñecas que reflejaban condiciones específicas como estar en silla de ruedas (1997) tener prótesis ortopédicas o vitíligo (2022).
“Fenómenos como venta, moda, opinión pública, pueden verse impactados por esta muñeca y Barbie ha ido cambiando su cara, su peinado, su maquillaje, respondiendo a las distintas tendencias. Incluso ha sido embajadora UNICEF… por eso todo lo que gire alrededor de ella puede generar tendencias, opiniones y noticias”, señaló Acosta.
Barbie ‘de carne y hueso’
La muñeca Barbie, catalogada por algunos como la más famosa de la historia, ha sido también una de las que más controversia ha generado por una característica en particular: su aspecto físico.
Durante más de medio siglo, la muñequita influyó el concepto de belleza femenino con ‘medidas perfectas’; razón por la cual los creadores presentaron, con el pasar del tiempo, las versiones ‘curvy’ (cuerpos curveados) ‘petite’ (bajitas) y ‘tall’ (más altas del promedio).
Pero ¿es SALUDABLEMENTE posible el cuerpo de Barbie? ¿Ese cuerpo esbelto que por años se aferró a la mente de las niñas, adolescentes y mujeres adultas?
La respuesta es sí.
“Sobre todo en mujeres que ya tienen una constitución anatómica que es el reflejo de una herencia familiar de cuerpos delgados. En ese caso, sí es posible mantener el estereotipo con ese canon de belleza sin perjudicar la salud en ese tipo de mujeres que ya nacieron con esta constitución anatómica”, señala la doctora Montserrat Rodríguez, médica gastroenteróloga y nutricionista.
Sin embargo, “la apariencia física no lo es todo”, agrega, “pues es necesario tener buen funcionamiento de todos tus órganos, todos tus sistemas corporales, alimentarse saludable y balanceadamente, con las porciones correctas, ejercitarse y dormir bien”.
Los dietistas coinciden en que para lograr un ‘cuerpo perfecto’ primero hay que amar el que tenemos e irlo moldeando según las proporciones y alcances naturales. Es así como, si bien es cierto lograr un cuerpo esbelto de forma saludable, no es correcto intentar forzar las medidas para ‘ajustar’ lo físico a una imagen utópica.
Barbie en 2023
Para los que tienen casi la edad de la muñeca, más sesenta años después, la Barbie representa nostalgia de juegos infantiles y logros alcanzados; pues, sobre todo en América Latina, comprar alguna de estas muñequitas, se traducía en meses de ahorro, pues su precio no era asequible para muchos bolsillos de los 1970 y 1980.
Como señala Yorelis Acosta, “no es primera vez que un juguete pasa a la pantalla grande. El atractivo, aparentemente, dirigido a los niños; en realidad, está apelando a los adultos y a nuestra nostalgia. Adultos de varias generaciones que han seguido la evolución de la Barbie”. Quizás esto explique, en parte, el gran atractivo de la película protagonizada por Margot Robbie y Ryan Gosling.
Si bien el culto a la muñeca creó durante una época un reforzamiento constante de cómo las niñas deseaban ser, “afortunadamente, a medida que nosotras hemos madurado como mujeres en la sociedad hemos aprendido a encontrar nuestro valor en todo lo que tenemos, no solo en lo que se ve, sino en todo el aporte que como mujeres tenemos en nuestro hogar, con nuestros seres queridos y en nuestra sociedad”, explicó Rodríguez.
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