“Hasta ahora lo que han resuelto, afirmó el presidente, no tiene ningún fundamento, no es que no puedan castigarme por ser un asunto administrativo es, sencillamente que, claramente están mintiendo, están falseando la realidad, no tienen pruebas”
Si hubieran pruebas, y estas fuesen contundentes sobre la intromisión directa del presidente López Obrador en las elecciones 2024, y si estuvieran documentadas y sólidas hace rato hubieran iniciado los procesos en contra del presidente durante la contienda y, además hubieran hecho “paro-moratoria electoral” para fortalecer la denuncias y eso si hubiera sido contundentemente un golpe mortal al proceso electoral asestado por los opositores, lo hicieron en el legislativo (Moratoria Constitucional) bien lo hubieran podido hacer en lo electoral, pero no tenían pruebas, ni las han tenido nunca.
El juego electoral estaba siendo jugado bajo las mismas reglas establecidas en la ley electoral, elaborada y aprobada por el PRI-PAN cuando fuero gobierno y tenían todo el poder en México, la ley electoral vigente es su ley, ellos la diseñaron a su semejanza y se negaron rotundamente a cambiarla cuando el presidente López Obrador propuso una Reforma Electoral y tenían datos e información de que, según sus asesores, la contienda electoral estaba cerrada, que había un voto oculto que favorecía a ellos, por eso no actuaron si realmente hubieran tenido pruebas contundentes de la intromisión del poder del estado.
Siguieron participando en el proceso a sabiendas, según ellos, que supuestamente había gravísimas intromisiones presidenciales, y de todo el aparato del estado, junto con recursos públicos siendo que, si los hubiera habido, estos son extremadamente difíciles de ocultar y, la prueba de que nunca lo hubo, los opositores jamás pudieron documentar tajantemente una sola prueba de ello, incluso de que tan no se puede ocultar es que los opositores nunca pudieron tapar la compra de votos cuando fueron descubiertos contundentemente con bodegas en distintos puntos del país llenas de artículos para la compra del voto y se les documentó y exhibió en medios, redes, prensa porque era imposible ocultarlo, y menos en la elección pasada donde había ojos por todos lados.
El sí pero no de la Sala Especializada del Tribunal Federal Electoral es una muestra de ello, si porque lo dices tú, pero no porque no lo documentas fehacientemente para poder sancionar e incluso anular la elección.
Anular la elección es el sueño dorado de los opositores principalmente de Claudio X González y Xóchitl Gálvez así que si tuvieran las pruebas madre y contundentes júrenlo que no pararían con recursos, y recursos jurídicos con todos sus despachos de abogados para lograr la anulación de la elección, estarían jugándose el todo por el todo y no es así porque saben que no tienen nada pero, aun así, están jugando sus últimas cartas disponibles con mentiras y violaciones a la Constitución y las leyes.
No tienen nada más que las ganas de manchar la ejemplar elección del 2 de Junio y tener los argumentos posibles para su trabajo de proselitismo, y descrédito al nuevo gobierno que a partir de Octubre buscarían comenzar a menguar la fuerza política indiscutible de la virtual presidenta electa Claudia Sheinbaum.
Jugaron con sus propias reglas el PRI-PAN-PRD, que Morena en su momento quiso cambiar, y ante el desastroso resultado obtenido, y nada favorable a ellos, hoy se quieren martirizar ante tremenda tragedia electoral sufrida.
Con sus propias reglas electorales les propinaron tremenda apabullada salvaje el pueblo de México.
Ante la necesidad de reflectores la candidata opositora lo único que sigue logrando es descrédito y más descrédito, así como repudio, porque su odio, rencor y coraje al presidente López Obrador, sumamente manifiesto, no le permite tomar cinco minutos de respiro para evaluar su dignidad.
Acusar sin sustento puede ser una difamación o una calumnia: la difamación consiste en realizar una imputación sobre otra persona de un hecho falso, que causa deshonra, descrédito, perjuicio o la exponga al desprecio de alguien más; mientras que la calumnia se refiere a la atribución falsa que hace una persona sobre otra persona por la supuesta realización de un delito o de un acto que no se cometió.
La Senadora Xóchitl Gálvez Ruíz está caminado sobre el filo de la navaja al estar señalando al presidente sobre supuestos delitos cometidos, que son de consideración y delicados, durante el proceso electoral utilizando su VERBORREA mentirosa y cargada de toxicidad hacia el presidente, buscando a como dé lugar causar el mayor daño posible por lo que sea y como sea.
Hay que recordar que el Tribunal Federal Electoral es uno de los afectados por la Reforma al Poder Judicial Federal y que de tener pruebas contundentes sobre la participación en el proceso electoral del presidente por supuesto que no se tocarían la toga para anular la elección, la segunda Sala Superior del Tribunal en sus resolución es inatacable y para ello se requiere CONTUNDENCIA PROBATORIA porque de no haberla el país se incendia y las consecuencias serían muy serias, demasiado serias, donde, además, los Magistrados estarían en altísimo riesgo si subestiman al pueblo ante una decisión arbitraria y sin sustento, una decisión marrullera.
Se está buscando sustentar, crear y construir una trama de engranaje de supuestos sucesos inexistentes para justificar una decisión de altísimo riesgo y, si es sustentada en mentiras que no se pueden comprobar, es de kamikazes el hacerlo.
Ya el Poder Judicial intento llevar a cabo un acto anticonstitucional para poder detener la calificación electoral que legalmente le favorece a Morena y sus aliados a través del amparo del Juez Administrativo Rodrigo de la Pesa el cual se salió de sus facultades para intentar dar golpe en la Sala Superior del Tribunal Federal Electoral y hoy se encuentra este juez en el umbral de un Juicio Político y de una demanda penal en la Fiscalía General de la República.
Si poco les importan las consecuencias de altísimo riesgo a los Magistrados, (Calderonistas la mayoría) se aventarán el tiro de anulación de la elección con las “CHISMES Y DIRETES” de Xóchitl Gálvez.
Pero si lo intentan, y no les resulta, estarán en el umbral también de demandas penales los Magistrados una vez que entre la Reforma al Poder Judicial recordando que el objetivo es detenerla la Reforma por parte de los opositores, hoy en el reducto último de la derecha, el PJF, desde donde intentarán detener la mayoría calificada de Morena y sus aliados.
La acusación sin pruebas suficientes es una práctica injusta y potencialmente dañina. En un sistema legal y justo, se requiere evidencia sólida para respaldar cualquier acusación, es obligación moral, ética y profesional del impartidor de justicia el determinar con prontitud y sapiencia cuando no hay pruebas sustentadas para proceder, como hoy sucede en el PJF donde se crean las pruebas o se aceptan las tramas como está sucediendo en la Sala Especializada del Tribunal Federal Electoral.
Si pero no, solo para otorgar sustento a la trama jurídica que se avecina.
“La Sala Especializada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación determinó que el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) coaccionó el voto con sus conferencias mañaneras en 2023, pero no impuso ninguna sanción. La violación a la contienda electoral se debió a las expresiones emitidas en las conferencias de prensa realizadas el 9 y 11 de mayo de 2023, en las que hizo alusión al “Plan C” y la necesidad de alcanzar una mayoría calificada en las cámaras del Congreso de la Unión para continuar con lo que llama transformación. A pesar de la deliberación, el TEPJF no pudo sancionar al Presidente por infracciones de índole electoral, por lo que únicamente declara su responsabilidad”
Raúl Sabido
Egresado de la Facultad de Comercio y Administración por la Universidad Autónoma de Tamaulipas. Su desarrollo profesional ha sido en empresas privadas en posiciones directivas donde a logrado acumular 42 años de servicio.
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