Dicen las sagradas escrituras que el hombre sólo puede cosechar lo que ha sembrado (Gálatas 6:7). El ex presidente número 45 de los Estados Unidos ha sido víctima de su propia lengua, despertó el odio entre sus comunidades, alentó la violencia, ha sido temerario en sus palabras. Hizo propio un discurso de odio racial y contra los migrantes, hizo que el país se dividiera en dos. Los resultados son tangibles.
Las elecciones en Estados Unidos serán en noviembre, aún están definiéndose candidatos nominados por dos partidos que han mantenido el poder en la historia de las elecciones norteamericanas. Sin embargo, se da como un hecho que serán los dos partidos, demócrata y republicano, que prevalecerán en la hegemonía política.
El atentado contra Donald Trump el pasado sábado 13 de julio representa una desesperación ante una elección cerrada. Desesperación en el lado republicano porque no logra convencer a todos sus militantes de que él (Trump) es el mejor candidato y del lado demócrata porque Joe Biden no logra una candidatura contundente, sigue cometiendo errores que lo hacen ver como un candidato débil, muy débil.
Sin embargo, hay también escépticos que dicen que todo fue un espectáculo montado. Puede ser, pero con la vida humana no se puede jugar sea un teatro montado o un acto de verdadero terrorismo interno, se debe condenar, como se hizo desde un inicio, para que no vuelvan a suceder los magnicidios a los que Estados Unidos ha estado tenido un largo historial.
Las encuestas juegan un papel importante, Pensilvania tiene a Donald Trump como el posible ganador en la encuesta más reciente por 3 puntos y representa 20 votos electorales. Sin embargo, este estado fue para Joe Biden hace 4 años con una diferencia de apenas 2 puntos porcentuales (es su estado natal). Es decir, sería un estado que cambiaría el curso de la historia, ya que recordemos que Joe Biden ganó en el 2020 con 306 votos electorales de 270 que necesitaba para ser ungido como el presidente número 46.
Virginia se ha convertido también en otro de los estados claves ya que representa 13 votos electorales, aquí la ventaja la mantiene Joe Biden con un escaso margen de 3 puntos porcentuales. El estado de la costa este al ponerse al borde de la línea entre el triunfo o la derrota presidencial pondría en aprietos una presidencia que ha sido muy cuestionada en sus resultados, principalmente en materia de una gran promesa de reforma migratoria, en materia económica y de mejores sueldos y salarios para millones de ciudadanos y residentes permanentes.
La fantasía del atentado en el lado mexicano hizo cuestionar el mismo atentado, suspicacia si fue armado, si en realidad no fue un acto provocado o bien, por qué falló el tirador. La muerte de este, a través de uno de los francotiradores del servicio secreto va a dejar dudas en un ambiente enrarecido por la violencia… doméstica. Por lo pronto, Donald Trump sale victorioso de este episodio, lo que obligará a Joe Biden y su equipo a mejorar su estrategia de comunicación política y mostrar sus mejores cartas si quiere ganar la reelección presidencial.
Eduardo Borunda
Doctor en Ciencias Sociales por El Colegio de la Frontera Norte. Máster en Administración y Licenciatura en Administración Pública y Ciencia Política por la Universidad Autónoma de Chihuahua. Ex Consejero Presidente de la Asamblea Municipal Juárez del Instituto Estatal Electoral, Ex Consejero Electoral para el IFE y IEE.
Actualmente Profesor de Tiempo Completo en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UACH, institución de la que fue director del 2005 al 2010.
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