En el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, la Dirección de Salud platicó las diferentes acciones que se llevan a cabo para atender y prevenirlo.
Ciudad Juárez, Chih .- Daphne Patricia Santana Fernández, titular de la dependencia, comentó que por medio del Centro de Salud Urbano B, el equipo de psicología se da a la tarea diaria de atender a pacientes y familiares a través de consultas y asesorías; además se ofrecen charlas para que el suicidio deje de ser un tabú y permita pedir ayuda a quienes están en riesgo.
Es un tema difícil de abordar pero se debe tratar con responsabilidad y apertura; por ello el trabajo que realiza la Dirección de Salud se centra en tres ejes fundamentales: la detección temprana, la orientación especializada y la psicoeducación.
Aseguró que el equipo de psicólogos está preparado para identificar señales de alerta en las personas que puedan estar en riesgo, ya sea mediante consulta directa o a través de la interacción con su entorno familiar y social.
Explicó que el primer paso es crucial para intervenir a tiempo y ofrecer una guía clara sobre los recursos disponibles y los pasos a seguir.
En los casos donde se detecta un riesgo significativo, se ofrece atención personalizada explicando las opciones y recursos disponibles, detalló.
Cuando es imprescindible, también se ayuda a elaborar planes de emergencia que ofrecen respuestas inmediatas y prácticas para gestionar una crisis mientras se formalizan las derivaciones necesarias, dijo.
No solamente se ofrece atención directa, también se imparten pláticas para sensibilizar a la comunidad, ya que de esa manera se eliminan los estigmas que rodean al suicidio, desafiando los mitos y tabús que muchas veces impiden que los pacientes busquen ayuda, explicó.
La educación es una herramienta esencial para la prevención porque al romper el silencio y superar el miedo, la persona siente la libertad de pedir apoyo.
Durante las charlas que se imparten, también se informa sobre los recursos disponibles y las señales de alerta que deben tenerse en cuenta, ya que es crucial que la persona en riesgo y sus allegados conozcan las opciones de apoyo y los servicios especializados que existen en la comunidad.
Santana Fernández mencionó que se promueve un diálogo abierto para que la gente comprenda que es necesario hablar del suicidio para proteger vidas.
A lo largo del proceso, se crea un ambiente de confianza y seguridad que permite a los pacientes sentirse acompañados y comprendidos; de esta forma, quienes contactan a los psicólogos saben que no están solos, abundó.
A través del Centro de Salud Urbano B estamos profundamente comprometidos con la prevención del suicidio a través de la educación y orientación adecuada, añadió.
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