La creación de un Sistema Nacional de Cuidados para que se incluya en nuestra Constitución representa un logro histórico que vendrá a aligerar la carga invisibilizada que históricamente recaía en las mujeres, las adolescentes y las niñas mexicanas.
Este gran logro feminista sienta las bases para la igualdad entre mujeres y hombres. Un México que cuida y se cuida.
Con esta iniciativa suscrita por las senadoras Martha Lucía Mícher Camarena, Minerva Citlalli Hernández Mora y Ernestina Godoy Ramos, así como el senador Marcelo Luis Ebrard Casaubón, integrantes del Grupo Parlamentario Movimiento de Regeneración Nacional, hemos dado el primer paso en el Senado para convertir esta propuesta en ley.
La equidad es justicia
Cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (Inegi) a finales del 2023, señalan que el promedio del valor económico del trabajo no remunerado asciende al 24.3 por ciento del producto interno bruto a nivel nacional.
Por ejemplo, para Chihuahua el trabajo no remunerado representa el 23.7 por ciento del PIB del estado.
Las cifras del Inegi también indican que el trabajo no remunerado en los hogares es realizado en mayor medida por mujeres, la media indica 72.2 por ciento frente a un 27.8 por ciento de los hombres.
La aprobación de la ley para crear el Sistema Nacional de Cuidados permitirá generar condiciones de equidad para las mujeres, como lo son: desfeminizar las actividades del hogar; es decir, erradicar la equivocada creencia social de que las actividades del hogar son destinadas únicamente para la mujer o que tienen género.
En el ámbito cultural y social impulsará un cambio desde las causas que permitan la movilidad social y profesional de las mujeres.
Implementar políticas públicas que atiendan la necesidad de atención para impulsar la mejora en calidad de vida de ellas, nuestras hijas, nuestras madres, nuestras hermanas.
Con el paso del tiempo, esta ley será un apoyo para que las mujeres se liberen de la carga que representa el trabajo en el hogar, el cual, les impide su desarrollo personal y profesional.
Como bien lo menciona la compañera senadora Martha Lucía Mícher Camarena, los cuidados son: “El conjunto de trabajo, actividades y emociones de reproducción de la vida cotidiana, es decir, aquellas que se realizan de manera reiterada para el sostenimiento de la vida diaria; incluye las actividades que se realizan dentro y fuera de los hogares para brindar bienestar físico, psico-emocional y social de todas las personas, principalmente quienes presentan mayores niveles de dependencia y carentes de autonomía con la finalidad de que logren vivir bien y desarrollen sus capacidades”.
Las “redes de cuidados” que surgen en esta propuesta están compuestas por las personas que dan cuidado, quienes lo reciben (personas cuidadoras y cuidadas), los actores institucionales, los marcos normativos, el sector privado y la participación comunitaria, que alude a los múltiples encadenamientos no lineales y dinámicos que se dan entre los actores que participan en el cuidado, e incluso los escenarios donde suceden y las interrelaciones que establecen entre sí.
Con el Sistema Nacional de Cuidados se podrán planificar y articular las políticas y acciones necesarias para contribuir a la corresponsabilidad en el trabajo de cuidados, para la eliminación de la actual división sexual del trabajo, la redistribución de la carga de trabajos que actualmente realizan las mujeres en los hogares, y, al mismo tiempo, generar la oferta de servicios de cuidado para la población que así lo requiere.
El órgano rector o Junta Nacional de Cuidados estará integrado por las Secretarías de Hacienda, Trabajo, Educación, Cultura y Salud; Bienestar, por el Instituto Mexicano de la Seguridad Social, el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia, el Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación y las Personas titulares de las Secretarías de Bienestar o sus homólogas de las entidades federativas, el Instituto Nacional de Personas Adultas Mayores, de la institución responsable de las personas con discapacidad, así como cualquier otra institución pública que la Junta Nacional de cuidados considere necesario incluir como integrante y/o invitar.
La coordinación estará a cargo del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia y la Secretaría Ejecutiva a cargo del Instituto Nacional de las Mujeres.
La creación de este sistema permitirá el cuidado digno, la redistribución de las responsabilidades de cuidados entre hombres y mujeres, mejorar las condiciones laborales de las personas y más allá de ello, erradicar las violencias en los hogares.
Es una tarea que todas y todos debemos hacer nuestra.
Juan Carlos Loera de la Rosa
Empresario y político defensor de la cuarta transformación.
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