El dictamen propone ajustes a la Constitución en materia salarial para proteger el ingreso de los trabajadores.
Ciudad de México (ADN/Staff) – El Senado de la República discutió y aprobó un dictamen que busca reformar el artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, específicamente el primer párrafo de la fracción sexta del apartado A y adicionar un tercer párrafo a la fracción cuarta del apartado B. La propuesta tiene como objetivo establecer condiciones salariales que garanticen la dignidad y la protección del poder adquisitivo de los trabajadores mexicanos.
Durante la sesión, encabezada por el Senador Óscar Cantón Zetina, se destacó la importancia de la iniciativa presentada originalmente por el presidente Andrés Manuel López Obrador el 5 de febrero de 2024. La propuesta había sido previamente aprobada de forma unánime por la Cámara de Diputados, lo que subraya su relevancia en la agenda nacional y la amplia aceptación de las reformas propuestas.
El dictamen pone un énfasis especial en la protección de los salarios mínimos y establece un ingreso mínimo garantizado para sectores estratégicos como maestros, personal de salud, policías y miembros de la Guardia Nacional. De acuerdo con el régimen transitorio, el salario mínimo para estos sectores no podrá ser inferior a 16,777 pesos mensuales, asegurando un nivel de vida digno acorde a la responsabilidad de sus labores. Esto busca rectificar la pérdida histórica del poder adquisitivo en el país, donde entre 1976 y 2016 se registró una caída superior al 70%.
En palabras del Senador Cantón Zetina, esta reforma representa “un antes y un después en la protección de los salarios en México” y responde a una demanda histórica de la clase trabajadora. Asimismo, enfatizó que el dictamen incluye la intención de estabilizar el salario mínimo por encima de la inflación, evitando que los trabajadores vean disminuido su ingreso debido a las fluctuaciones económicas.
El proyecto también incluye una visión de bienestar más allá de lo económico. Cantón Zetina resaltó que el derecho a la felicidad y a una vida plena para los trabajadores es un componente esencial de esta reforma. Esta filosofía se alinea con el “humanismo mexicano” promovido por la Cuarta Transformación, encabezada por la administración actual y que la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo pretende continuar.
Con la aprobación de esta reforma, México se suma a países como Brasil, Francia y Polonia, que han adoptado mecanismos constitucionales para la protección de los salarios. El dictamen fue discutido con la finalidad de dar certidumbre económica a millones de familias, garantizar que los ingresos de los trabajadores no se vean afectados por factores inflacionarios y refrendar un compromiso con la justicia social.
El siguiente paso en la sesión consistió en la votación de la propuesta, donde los integrantes de las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos se pronunciaron a favor, asegurando que la iniciativa se incluya como parte de las políticas de mejora salarial en el país.
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