Durante la semana del 9 al 15 de diciembre, se clausuraron 18 negocios por irregularidades en la venta de alcohol en Chihuahua, resaltando la necesidad de regulación.
Chihuahua, Chih. (ADN/Staff) – Durante la semana del 9 al 15 de diciembre, la Secretaría General de Gobierno del estado de Chihuahua, a través de la Subsecretaría de Gobernación, llevó a cabo un operativo de inspección en establecimientos dedicados a la venta y comercialización de bebidas alcohólicas.
En total, se realizaron 294 inspecciones, resultando en la clausura de 18 negocios, un proceso que refleja no solo las normas locales en cuanto al control del consumo de alcohol, sino también el compromiso del gobierno para regular y promover un orden en el ámbito de la vida nocturna y la seguridad pública.
De las clausuras mencionadas, los municipios de Chihuahua y Ciudad Juárez fueron los más afectados, con una notable concentración de cierres en la frontera.
En Chihuahua, se clausuraron tres tiendas de abarrotes y un restaurante, todos por diversas infracciones relacionadas con la falta de permisos.
En Ciudad Juárez, las autoridades clausuraron13 negocios, que incluyeron desde tiendas de abarrotes hasta centros nocturnos y salones de eventos, muchos de los cuales estaban operando fuera de los horarios establecidos o carecían de la documentación necesaria para su funcionamiento legal.
Este tipo de operativos no son nuevos en la región. Históricamente, las autoridades han tenido que lidiar con las consecuencias de una cultura que a menudo asocia el consumo de alcohol con festividades y eventos sociales, pero que también está vinculada a la violencia y a problemas de salud pública.
A lo largo de los años, el gobierno ha implementado diversas regulaciones en un intento de equilibrio entre la promoción de un ambiente de celebración y la necesidad de mantener el orden y la seguridad.
La clausura de negocios como el restaurante “El Botanero y la Puerta de Alcalá”, que fue cerrado debido a una riña, pone de manifiesto el impacto de la violencia en el ámbito social y económico de la región.
Ciudad Juárez, en particular, ha enfrentado desafíos significativos en cuanto a la seguridad pública, y los incidentes relacionados con el alcohol no sólo afectan a los involucrados directamente, sino que tienen repercusiones en toda la comunidad.
Las autoridades han enfatizado la necesidad de que los propietarios cumplan con la normatividad existente, no solo para evitar sanciones, sino también para contribuir a un entorno más seguro.
Además de los aspectos de seguridad, las inspecciones revelan la complejidad del sistema regulatorio que rodea la venta de alcohol en Chihuahua.
Muchos de los negocios clausurados fueron sancionados por violaciones de giro o falta de permisos, lo que indica que existe una necesidad persistente de educación y orientación para los empresarios locales.
Es esencial que los comerciantes comprendan las normativas vigentes y se ajusten a ellas, no solo para evitar sanciones, sino también para fomentar un ecosistema comercial responsable y sustentable.
Cabe señalar que este operativo se realizó en colaboración con la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE), lo que subraya la importancia de la interinstitucionalidad en la lucha por mejorar las condiciones de seguridad en el estado.
Este enfoque más integral podría servir de modelo para futuros operativos, donde la cooperación entre diferentes niveles de gobierno y diversos sectores de la sociedad civil sea clave para restaurar la confianza en la aplicación de la ley y promover un ambiente más seguro para todos.
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