“La gallina de los huevos de oro se nos fue secando”
Enrique Peña Nieto, ex presidente de Mexico 2012-2018
Corría el mes de noviembre del 2014, el entonces gobernador de Chihuahua, Cesar Duarte Jaquez, se encontraba en la cúspide de su poder. No solo tenía a su partido, el PRI, bajo su control absoluto, también la “oposición” comía de su mano.
Para esos días ya había desarrollado un sistema de pagos clandestinos, después conocido como “Nomina Secreta”, con la que el gobernador Duarte se aseguraba que la “oposición” no fuera tan opositora, a través de la repartición de dinero por abajo del agua para compra de voluntades.
Hoy se sabe que la actual gobernadora Maria Eugenia Campos Galvan, el actual fiscal general del estado, Cesar Jauregui Moreno y el actual alcalde de Ciudad Juarez, Cruz Perez Cuellar, entre muchos otros, estaban incluidos en la alegre nómina secreta del gobernador, y recibían puntualmente y sin rubor, un dinerillo que les serviría para seguir avanzando en sus respectivas carreras políticas.
Es en ese contexto, que el maquiavélico Cesar Duarte decide proteger su futuro político, asegurándose de que el poder judicial no fuera a quedar a quedar en manos que no le fueran favorables, y realiza para ello, una reforma a la ley correspondiente para designar jueces a modo.
El Congreso estatal de entonces, aprobó por unanimidad de l@s diputad@s presentes, Maru Campos y Cesar Jauregui incluidos, que se crearan 13 nuevas posiciones para magistrad@s, los cuales habrían de permanecer en su cargo por 15 años.
De esa manera, el angelito se aseguraba que aun en el remoto caso de que el “nuevo PRI”, el de Peña Nieto, no retuviera el poder, el habría de estar protegido contra futuras embestidas en contra de su rastro de corrupción y latrocinio, al menos por los dos siguientes sexenios.
¿Quién lo iba a juzgar? ¿Su propio partido, para quienes había desviado no pocos millones del erario estatal en apoyo de las campanas en el resto de la Republica? ¿O la oposición centavera, a quien tenía comprada con las migajas que repartía en la nómina secreta?
Para mala suerte de don Duarte, el pueblo de Chihuahua, harto de los abusos y la desvergüenza del “nuevo PRI” decidió que su sucesor fuera, nada más ni nada menos que Javier Corral, uno de los opositores que no sucumbieron ante los cañonazos de billetes del gobernador y quien hizo campana precisamente denunciando la corrupción de Duarte.
Como lo prometió en campaña, Corral persiguió a su antecesor durante todo su quinquenio, hasta lograr su detención en los Estados Unidos, y su posterior extradición. Aquí es donde entra en juego la habilidad política del corruptazo.
En cuanto Corral dejo la gubernatura y lo remplazo Maru Campos, la situación cambio para ambos personajes, por un lado, a Cesar Duarte, sus jueces le han venido regresando propiedades que habían sido incautadas, poco a poco se le han estado desestimando casos, y hasta dejo la cárcel para llevar su proceso en libertad. No nos sorprenda que en breve la gobernadora le ofrezca disculpas a su otrora benefactor.
Por la otra parte, a Corral se le volteo la tortilla, siendo el ahora el acusado de corrupción. Lo único que lo separa de la cárcel, es el fuero que Morena y la 4T le brindaron al darle una curul como Senador de la Republica.
Por cierto, hay que reconocer que el desempeño de Javier como legislador, siempre fue sobresaliente, comparado con su desempeño como jefe del Ejecutivo Estatal, donde su actuación fue más bien mala, o mediocre en el mejor de los casos.
Pero regresando al asunto de los jueces impuestos por Duarte, ahora, el Maru-Duartismo, o el PRIANismo chihuahuense, viendo que el ambiente político nacional está en su contra con la inminente elección de jueces y magistrados, deciden pagar la factura a esos 13 magistrad@s que tan bien hicieron su labor en estos años, Siendo el caso más vergonzoso el de la actual presidenta del Poder Judicial, Myriam Hernández Acosta,
La señora Hernandez Acosta, como buena ahijada política de Duarte Jáquez, testificó a su favor durante el juicio de extradición en contra del ínclito exgobernador, allá en Miami, Florida y es tal su frescura de la señora presidenta, que sigue sin ver, o sin querer ver, el evidente conflicto de interés.
Y que mejor manera de saldar las deudas que con dinero constante y sonante. Para ello, el PAN, el PRI, y las remoras locales aprobaron en días pasados, una reforma a la ley estatal, para que l@s Magistrad@s de Duarte y Maru Campos reciban una pensión vitalicia, independientemente del tiempo de servicio, emulando de esa manera a los jueces federales que también tienen la costumbre de mantener fuerte la succión a la ubre del Estado (federal o local, no importa).
Esa es la verdadera cara tanto del PRI como del PAN, y por eso les molesta tanto que los jueces sean electos en un proceso abierto a la sociedad. De esa manera pierden el control sobre ese poder que, en teoría es independiente, pero que, en la práctica, siempre funcionó como un apéndice de quien detenta el poder.
La propia Maru Campos, en el 2022, hizo su propia reforma legal, para imponer magistrados a modo sin concurso de oposición, gracias a la cual impuso otros tres magistrados. No tienen vergüenza.
Yo no estoy seguro de que el problema de falta de justicia e inseguridad se vaya a resolver con la elección de jueces y magistrados, en todo caso a mí me hubiera gustado más la elección de fiscales, pero independientemente de lo que este humilde opinador crea, reconozco que este proceso habrá de proveer una bocanada de aire fresco a un Poder Judicial podrido y anquilosado como el que tenemos actualmente, y quienes, por cierto, se sentían intocables.
Es cuánto.

José Antonio Blanco
Ingeniero Electromecánico. Juarense egresado del ITCJ con estudios de maestría en Ingeniería Administrativa por la misma institución y diplomado en Desarrollo Organizacional por el ITESM. Labora desde 1988 en la industria maquiladora. Militó en el PRD de 1989 al 2001.
En la actualidad, un ciudadano comprometido con las causas progresistas de nuestro tiempo, sin militancia activa.
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