Un nuevo frente frío afectará al norte de Chihuahua, con vientos de hasta 85 km/h y posibilidad de nieve en regiones específicas. Se recomienda precaución.
Chihuahua, Chih. (ADN/Staff) – La entrada de un nuevo frente frío por las regiones norte y noroeste de Chihuahua ha generado alertas en diversas localidades de la entidad, donde se prevén vientos que podrían alcanzar hasta los 85 kilómetros por hora.
La Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC) ha señalado que estos fenómenos climáticos afectarán principalmente a municipios como Juárez, Ascensión, Janos y Casas Grandes, provocando condiciones adversas que requieren la atención de la ciudadanía.
Este fenómeno meteorológico se enmarca dentro de un patrón estacional que trae cambios significativos en el clima de la región, recordando a los chihuahuenses que deben estar preparados ante cualquier eventualidad.
El pronóstico incluye además la posibilidad de lluvias, que podrían manifestarse en forma de aguanieve o incluso nieve en las partes más altas del municipio de Madera. Este tipo de fenómenos no son inusuales en la entidad, donde la topografía montañosa y las condiciones climáticas extremas contribuyen a la formación de nieve en los meses más fríos del año.
Históricamente, la llegada de frentes fríos en Chihuahua ha estado asociada con un aumento en la vulnerabilidad de diversas comunidades, principalmente aquellas que no cuentan con la infraestructura adecuada para afrontar estas inclemencias.
Los vientos fuertes, además de generar un impacto en la seguridad de los habitantes, pueden provocar tolvaneras, fenómenos típicos de las áreas desérticas de la región. Ante esto, la CEPC ha recomendado a la población limitar los traslados en carreteras clave como Chihuahua-Juárez y Chihuahua-Ojinaga, donde es más probable que se registren condiciones de poca visibilidad y peligros inminentes debido a la combinación de viento y polvo.
La intersección de estas vías, vitales para la comunicación y el comercio, resalta la importancia de garantizar la seguridad en trayectos que conectan a diversas comunidades del estado.
Para las localidades de Ahumada, Guadalupe y otros municipios en el trayecto, se espera que las ráfagas de viento oscilen entre 65 y 75 km/h. Este rango de velocidad es suficiente para generar daños materiales, especialmente en estructuras vulnerables y en cultivos, lo que podría tener un impacto en la economía local, que en muchas zonas depende de la agricultura y la ganadería. En este sentido, la continuidad de las actividades económicas se ve amenazada, lo que podría repercutir en el sustento de miles de familias chihuahuenses.
A medida que el frente frío avanza, las condiciones climáticas se tornan más severas, exigiendo que las autoridades mantengan informada a la población sobre las proyecciones meteorológicas y las medidas de prevención.
La CEPC ha enfatizado la necesidad de que la ciudadanía mantenga su vigilancia y se prepare ante la llegada de posibles lluvias e inclemencias que podrían persistir hasta el sábado. Este llamado no solo es importante en términos de prevención ante desastres naturales, sino que también refleja el esfuerzo conjunto para fortalecer la resiliencia de las comunidades ante un clima cambiante.
Finalmente, es imprescindible que tanto los ciudadanos como las autoridades permanezcan en contacto y colaboren en la atención de los problemas que surjan consecuencia de estos fenómenos. La cultura de prevención y el conocimiento sobre cómo actuar frente a situaciones adversas son fundamentales para asegurar la integridad de la población ante la variabilidad climática.
En un estado donde el crecimiento de las poblaciones rurales y urbanas es constante, la capacidad de respuesta ante desastres naturales se convierte en un elemento clave para el desarrollo sustentable de Chihuahua.

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