Lessig es, junto con Fichte, el filósofo que mayor atención ha dedicado a comprender la esencia última de la Masonería.
Cuentan que cuando nuestro Querido Hermano Gotthold Ephraim Lessing se inició en los secretos y misterios de la Masonería y su Venerable Maestro le dijo:
– “¿Ve como no hay en la Masonería nada contrario a la Religión o al Estado?”
– el contestó: “Pues me habría gustado encontrarlo”.
Lessig es, junto con Fichte, el filósofo que mayor atención ha dedicado a comprender la esencia última de la Masonería.
Escritor y dramaturgo alemán. Hijo de un pastor protestante, Gotthold Ephraim Lessing cursó estudios de teología en Leipzig, que no tardó en abandonar para dedicarse plenamente a la literatura; de aquellos años juveniles data su intensa amistad con el poeta Ewald Christian von Kleist.
Cursó estudios de Teología, Filosofía y Medicina en las universidades de Leipzig y Wittenberg.
A lo largo de su vida escribió diversas obras:
- El joven erudito (Der junge Gelehrte) 1748
- Los judíos (Die Juden) 1749
- El librepensador (Der Freigeist) 1749
- Miss Sara Sampson 1755
- Philotas 1759
- Fábulas (Fabeln) 1759
- Laocoonte o sobre los límites en la pintura y poesía 1766
- Minna von Barnhelm 1767
- Emilia Galotti 1772
- Anti-Goetze 1778
- Nathan el Sabio (Nathan der Weise) 1779
- La educación de la humanidad (Die Erziehung des Menschengeschlechts) 1780
Este es un fragmento de su obra Diálogo para Masones. Esperamos que lo disfrutes.
SFU.
Sobre todo, mucha Salud, donde quiera que estén.
“El hombre de elevada posición gustoso se inclina y el inferior se presenta con la frente erguida”
Q∴H∴ Gotthold Ephraim Lessing
– Muy de desear sería, que en todo estado hubiera ciertos hombres que sobreponiéndose a las preocupaciones de nacionalidad, conocieran exactamente cuándo y dónde el patriotismo deja de ser virtud.
– Sería muy de desear.
– Muy de desear, que en cada estado hubieran algunos hombres que no sucumbieran a las preocupaciones de su religión natal, ni creyeran que necesariamente había de ser bueno y verdadero todo lo que ellos como tal hubieran reconocido.
– Muy de desear
– Muy de desear, que en cada estado existieran ciertos hombres que no vivieran ofuscados por las elevadas distinciones sociales ni a quienes repugnase la inferioridad civil, en cuya sociedad el hombre de elevada posición gustoso se inclina y el inferior pueda presentarse libremente con frente erguida.
– Sería muy de desear
– ¿Y si este deseo se hubiese realizado?
– ¿Realizado? Tal vez en una que otra parte, de vez en cuando existirán tales hombres.
– No solamente en una que otra parte de vez en cuando.
– En ciertas épocas y en ciertos países.
– ¿Y si hubiera ahora tales hombres en todas partes, y en adelante existieran para siempre?
– ¡Dios lo quiera!
– ¿Y que estos hombres no vivieran en inactiva distracción, ni siempre en una iglesia invisible?
– ¡Hermosa ilusión!
– En fin abreviando ¿y que estos hombres fuesen los francmasones?
La Cantera
La Cantera.Es un espacio de difusión pública sobre el librepensamiento, las buenas costumbres y para la preservación del pensamiento masónico moderno, bien sea masonería simbólica o filosófica; escocesa, yorkina o mexicana; o la obra filantrópica de Shriners o de Widow Sons; todo en este lugar.
Cualquier contribución editorial o comentario puede enviarla a nuestro correo electrónico.
Las opiniones expresadas por los columnistas en la sección Plumas, así como los comentarios de los lectores, son responsabilidad de quien los expresa y no reflejan, necesariamente, la opinión de esta casa editorial.