Descubre cómo la expropiación petrolera de Lázaro Cárdenas cambió el rumbo de la historia mexicana, asegurando la soberanía económica del país.
Ciudad Juárez, Chih. (ADN/Staff) – En un momento crítico de la historia mexicana, el presidente Lázaro Cárdenas tomó una decisión trascendental: la expropiación petrolera. Antes de este hito, el 95% de la industria estaba en manos extranjeras, lo que planteaba una seria amenaza para la soberanía económica del país.
Desde su ascenso al poder en 1934, Cárdenas mostró su compromiso con los trabajadores mexicanos y su deseo de resolver las tensiones con las empresas extranjeras, especialmente en el sector petrolero. La creación del sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana en 1936 marcó un primer paso hacia la protección de los derechos laborales.
Sin embargo, las empresas extranjeras se resistieron a las demandas de los trabajadores, desencadenando una confrontación que culminó en la expropiación. La Ley de Expropiación de 1937 proporcionó el marco legal para esta acción, permitiendo al gobierno mexicano tomar el control total de la industria petrolera.
El 18 de marzo de 1938, en un histórico discurso transmitido por radio nacional, Cárdenas anunció la expropiación, argumentando que era en interés del pueblo mexicano. Esta decisión no solo aseguró que el petróleo fuera propiedad de la nación, sino que también llevó a la creación de Petróleos Mexicanos (Pemex), una paraestatal encargada de la exploración, explotación y comercialización del petróleo en el país.
Durante su discurso, Cárdenas explicó las razones que lo obligaron a decretar la expropiación, así como se hacían de todos los bienes materiales de las 17 empresas extranjeras que se negaban a cumplir las demandas de los trabajadores. Estas compañías eran:
- Compañía Mexicana de Petróleo “El Águila” (Royal Dutch Shell).
- Compañía Naviera San Cristóbal.
- Compañía Naviera San Ricardo.
- Huasteca Petroleum.
- Sinclair Pierce Oil Company.
- Mexican Sinclair Petroleum Corporation.
- Stanford y Compañía.
- Penn Mex Fuel Company.
- Richmond Petroleum Company.
- California Standard Oil Company of Mexico.
- Compañía Petrolera El Agwi.
- Compañía de Gas y Combustible Imperio.
- Consolidated Oil Company of Mexico.
- Compañía Mexicana de Vapores San Antonio.
- Sabalo Transportation Company.
- Clarita S.A.
- Cacalilao Sociedad Anónima.
A nivel internacional, la expropiación provocó controversia y oposición, especialmente por parte de las compañías petroleras afectadas y algunos gobiernos extranjeros. Estados Unidos incluso intentó bloquear el petróleo mexicano, pero México logró sortear esta crisis vendiendo su petróleo a otras potencias, incluso durante la Segunda Guerra Mundial.
No obstante, las consecuencias económicas fueron significativas. México enfrentó una gran cantidad de deudas con las compañías petroleras expropiadas, lo que requirió una considerable inversión económica para solventarlas. La creación de programas como el Centro de Redención Económica Nacional refleja los esfuerzos del gobierno para hacer frente a estas obligaciones financieras.
Hoy en día, la industria petrolera sigue siendo un pilar fundamental de la economía mexicana, con la extracción de recursos energéticos concentrada en unos pocos municipios. La decisión de Cárdenas de expropiar el petróleo ha dejado un legado duradero en la historia de México, marcando un punto de inflexión en la lucha por la soberanía económica del país.
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