Francisco Garduño, comisionado a cargo del Instituto Nacional de Migración de México (INM), aseguró que ningún país tiene sus fronteras abiertas, pues “hasta en el cielo hay control migratorio”.
Moscú (Sputnik) – Garduño Yáñez participó en un recorrido en los diferentes campamentos que migrantes haitianos instalaron en Ciudad Acuña, Coahuila, con la esperanza de poder cruzar a Del Río, en Texas.
Durante un encuentro con periodistas en el parque Braulio Fernández, el titular del INM fue cuestionado si México se considera un país de fronteras abiertas, ya que el gobierno federal se comprometió a dar seguimiento a las peticiones de asilo de los migrantes.
“México nunca lo ha sido (un país de fronteras abiertas), no hay país sin fronteras, todos tienen condición migratoria. Válgase el ejemplo —que no es similar—, pero hasta en el cielo hay control migratorio”, aseguró Francisco Garduño.
La declaración se da cuando EEUU y México enfrentan una grave crisis migratoria debido a que más de 13 mil haitianos intentan llegar a territorio estadounidense como asilados, al tiempo que la Patrulla Fronteriza endurece las medidas de contención.
Apenas esta semana, el Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos anunció que suspendería las labores de la patrulla a caballo en la frontera con México tras la agresión a migrantes, tras difundirse videos y fotografías en la que se ve a agentes perseguir y agredir a latigazos a migrantes.
Al respecto, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, aseguró que se trabajan en varias alternativas para atender las peticiones de asilo, e incluso sostuvo que México no tiene inconveniente en recibirlos, siempre y cuando sean respetuosos de la ley.
“México puede recibir a migrantes de Haití, pero la gran parte de ellos quiere irse a Estados Unidos, sin embargo, se ofrecen todo tipo de soluciones de parte del Instituto Nacional de Migración y hay quienes si han aceptado el refugio en México, alrededor del 15%”, declaró el canciller mexicano.
En contraste, este viernes 24 de septiembre, el presidente de México Andrés Manuel López Obrador comentó que el país no puede volverse “un campamento de migrantes”, ya que el objetivo es frenar la migración con inversión.
Hay que atender el fondo primero. No queremos que México sea un campamento de migrantes, queremos que se atienda el problema de fondo, que la gente no se vea obligada a emigrar, porque si no continuamos con lo mismo, es retenerlos, ponerlos en albergue y no enfrentamos el problema de fondo”, comentó López Obrador.
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