El alcalde de Secaucus, Michael Gonnelli, dijo el domingo que funcionarios del condado Hudson han estado informando a la policía de Secaucus y a las autoridades municipales sobre la llegada de autobuses a la estación de tren en Secaucus Junction desde el sábado. Señaló que se creía que llegaron cuatro autobuses y dejaron a inmigrantes que luego tomaron trenes a la ciudad de Nueva York.

Gonnelli dijo que la orden ejecutiva firmada recientemente por el alcalde Eric Adams de Nueva York requiere que los operadores de autobuses avisen sobre las llegadas con al menos 32 horas de antelación y limiten las horas de bajada.

“Parece bastante claro que los operadores de autobuses están encontrando una manera de evadir los requisitos de la orden ejecutiva dejando a los inmigrantes en la estación de tren de Secaucus y haciendo que continúen por su cuenta hasta su destino final”, dijo Gonnelli en un comunicado. Insinuó que la orden puede ser “demasiado estricta” y está teniendo “consecuencias inesperadas”.

Gonnelli calificó la táctica como una “laguna jurídica” que los operadores de autobuses han encontrado para permitir que los inmigrantes lleguen a la ciudad de Nueva York, y añadió que la policía estatal ha informado que “esto está sucediendo ahora en las estaciones de tren de todo el estado”. Gonnelli prometió trabajar con las autoridades estatales y del condado y “continuar monitoreando de cerca esta situación”.

Un mensaje publicado en una cuenta de redes sociales de Jersey City decía que la agencia de manejo de emergencias municipal reporta que “aproximadamente 10 autobuses de varios lugares de Texas y uno de Luisiana han llegado a varias estaciones de tránsito en todo el estado, incluidas Secaucus, Fanwood, Edison y Trenton”. Alrededor de 397 inmigrantes habían llegado a esos lugares desde el sábado, según la publicación del domingo.

“Esta claramente será una conversación a nivel estatal, por lo que es importante que esperemos alguna orientación del gobernador sobre los próximos pasos” a medida que los autobuses continúen, decía la publicación.

Tyler Jones, portavoz del gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, dijo a lehighvalleylive.com que Nueva Jersey está siendo utilizado como punto de tránsito para los migrantes, casi todos los cuales continuaron hacia la ciudad de Nueva York. Jones dijo que los funcionarios de Nueva Jersey están coordinándose estrechamente con los funcionarios federales y locales “incluidos nuestros colegas al otro lado del Hudson”.

En la ciudad de Nueva York, un portavoz del Ayuntamiento dijo el lunes que la ciudad había “liderado a la nación en la respuesta a esta crisis humanitaria nacional, proporcionando compasión, atención, refugio y servicios vitales a más de 161.000 migrantes” desde principios de 2022. El portavoz caracterizó la orden ejecutiva como “parte de ese esfuerzo, para garantizar la seguridad y el bienestar tanto de los migrantes como del personal de la ciudad”.

El gobernador de Texas, señaló el portavoz, estaba tratando a los solicitantes de asilo “como peones políticos” y dejando a las familias en las áreas circundantes “en el frío y la oscuridad de la noche con boletos de tren para viajar a la ciudad de Nueva York”, como se hizo en Chicago en respuesta a una orden ejecutiva similar allí.

“Esta es exactamente la razón por la que hemos estado coordinando con las ciudades y condados circundantes desde antes de emitir nuestra orden, para animarles a tomar medidas ejecutivas similares para proteger a los migrantes contra esta crueldad”, dijo el portavoz.

Adams se sumó la semana pasada a los alcaldes de Chicago y Denver para renovar las peticiones de más ayuda federal y coordinación con Texas ante el creciente número de solicitantes de asilo que llegan a sus ciudades en autobús y avión.

“No podemos permitir que autobuses con personas que necesitan nuestra ayuda lleguen sin previo aviso a cualquier hora del día y de la noche”, dijo Adams en una conferencia de prensa virtual el miércoles con los otros alcaldes. “Esto no sólo nos impide prestar ayuda de forma ordenada, sino que pone en peligro a quienes ya han sufrido” tanto.

Los alcaldes demócratas, que se reunieron el mes pasado con el presidente Joe Biden, quieren más fondos federales, más permisos de trabajo y un horario para la llegada de los autobuses. Las ciudades ya han gastado cientos de millones de dólares para alojar, transportar y proporcionar atención médica a los migrantes.