Estados Unidos (VOA) –Organizaciones y grupos de voluntarios llegaron este jueves hasta el Observatorio Naval, la residencia de la vicepresidenta Kamala Harris, en Washington DC, donde dos autobuses dejaron a decenas de inmigrantes procedentes de la frontera sur.

Tatiana Laborde, directora general del grupo SAMU First Response, que asiste a los inmigrantes que llegan a Washington DC, dijo en entrevista con la Voz de América que estos se vieron sorprendidos con el cambio de itinerario el jueves.

“Nosotros estábamos a las cinco y media de la mañana listos para recibirlos en Union Station [la estación de trenes], pero hubo un cambio de último minuto que no fue informado a las organizaciones locales y los dejaron aquí, al lado de la casa de la vicepresidenta”, explicó en entrevista con la Voz de América Tatiana Laborde, directora general del grupo SAMU First Response, que asiste a los inmigrantes que llegan a Washington DC.

Los inmigrantes procedían de Del Rio Texas, desde donde fueron embarcados a la capital estadounidense por el gobernador republicano Greg Abbott.

Así, continúa la batalla política entre algunos gobernadores republicanos y la administración del presidente Joe Biden por la gestión de la frontera sur de Estados Unidos, definida por los republicanos como una política “de puertas abiertas”.

De hecho, cuando este jueves en la madrugada, dos autobuses con más de 70 migrantes provenientes de Del Rio, Texas, dejaron a sus pasajeros frente a la residencia de la vicepresidenta Kamala Harris, el Observatorio Naval, fue a forma de protesta por parte del gobernador texano Greg Abbott.

“Nos dejaron aquí a la deriva sin saber dónde ir. Nuestro destino es llegar hasta New York”, dijo David Morales, un inmigrante venezolano.

El grupo incluye personas provenientes de Venezuela, Uruguay, Colombia y México. Varios de ellos, según Fox News, dijeron que creen que la frontera está abierta, al contrario de lo que dijo la vicepresidenta Harris el domingo durante una entrevista.

Urgente solidaridad

Las autoridades locales han asegurado que notificación de que estos buses llegarían al Observatorio Naval. Usualmente llegan a la estación de trenes de Union Station, en el centro de DC. Se desconoce si allí llegarán más en los próximos días, pero los voluntarios dicen estar preparados para atenderlos.

“Tenemos ya los recursos para responder. Lo único… son días los como hoy donde llegan a otras áreas y nos toca movilizarnos para darles apoyo”, dijo Laborde.

María de las Hortas, una inmigrante hondureña se llegó hasta el lugar al ver la noticia en la televisión local y explicó a la VOA el motivo de su solidaridad.

“Andamos dando donaciones para las personas de nuestro país. Y pensamos en ir a comprar cosas, hacerles comida y traerles a ellos porque así como como ellos andan aquí, así llegamos nosotros a este país”.

Estrategia republicana

Este último convoy de autobuses llegó pocas horas después de que el gobernador de Florida, Ron DeSantis, cumpliera una promesa similar de transportar migrantes indocumentados a estados gobernados por demócratas. Envió dos aviones llenos de migrantes a Martha ‘s Vineyard, una isla en Massachusetts.

“Entonces, nuestro mensaje es: ya sabes, no somos un estado santuario. No tenemos beneficios ni nada de eso. Hay algunas jurisdicciones santuario, y eso sería mejor. Ahora, lo que sería mejor para Biden es hacer su maldito trabajo y asegurar la frontera”, dijo el gobernador.

Abbott y Desantis argumentan que la frontera estadounidense está fuera de control y que las autoridades de Washington DC y Nueva York deben asumir las realidades de la crisis fronteriza.