El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, la vicepresidenta Kamala Harris y los principales funcionarios militares del país participarán en una ceremonia de ofrenda floral el lunes en la Tumba del Soldado Desconocido en el Cementerio Nacional de Arlington, Virginia.

Biden, el secretario de Defensa Lloyd Austin y el presidente del Estado Mayor Conjunto, el general Mark Milley, también hablarán durante una ceremonia de conmemoración en el cementerio ubicado a las afueras de Washington.

El domingo, junto a su esposa Jill y familiares conmemoró el sexto aniversario de la muerte de su hijo Beau Biden, visitando su tumba. Allí ofreció un discurso sobre el dolor a las familias de militares y de los veteranos, en la víspera de la fecha que se celebra este lunes.

“Como nación, siempre debemos recordar, siempre recordar. Debemos recordar el precio que se pagó por nuestras libertades. Debemos recordar la deuda que tenemos con quienes la han pagado y las familias que dejaron atrás. Mi corazón está partido por la mitad por el dolor. Las comunidades nunca volvieron a estar completas”, dijo Biden.

Tras la Guerra Civil estadounidense, la colocación de ofrendas en las tumbas de los militares muertos en combate pasó a ser algo común en diferentes partes del país una vez al año.

Antes se le conocía como Día de la Condecoración y se conmemoraba cada 30 de mayo. Con el tiempo, se le comenzó a llamar Memorial Day. En 1971, se promulgó una ley que trasladó el feriado al último lunes del mes de mayo. El feriado también marca extraoficialmente el comienzo del verano.

En muchas ciudades se conmemora la ocasión con desfiles y bandas militares.

“En mi primer Día de los Caídos como Comandante en Jefe, quiero reafirmar mi creencia de larga data: es posible que tengamos muchas obligaciones como nación, pero solo tenemos una obligación verdaderamente sagrada, y es equipar a aquellos a quienes enviamos al peligro”, dijo Biden.