El presunto atacante es un ciudadano mexicano que ha sido deportado cuatro veces entre 2009 y 2016, según funcionarios de inmigración de EEUU.
Estados Unidos (VOA) – Una persecución de cuatro días en Texas de un hombre armado acusado de matar a cinco vecinos de origen hondureño terminó el martes cuando las autoridades, siguiendo una pista, dijeron que encontraron al sospechoso escondido debajo de una pila de ropa sucia en el armario de una casa.
Francisco Oropeza, de 38 años, fue capturado sin incidentes cerca de la comunidad de Conroe, al norte de Houston y a unas 20 millas (32 kilómetros) de su casa en la localidad rural de Cleveland. Ahí es donde las autoridades dicen que fue a la puerta de al lado y disparó a sus vecinos con un rifle estilo AR poco antes de la medianoche del viernes.
Oropeza había estado disparando en su propiedad y el ataque ocurrió después de que los vecinos le pidieron que se alejara más porque los disparos mantenían despierto a un bebé, según la policía.
Oropeza será acusado de cinco cargos de asesinato, dijo el alguacil del condado de San Jacinto, Greg Capers. La fianza se fijó en 5 millones de dólares.
“Pueden estar tranquilos ahora, porque él está tras las rejas”, dijo Capers sobre las familias de las víctimas. “Él vivirá su vida tras las rejas por matar a esos cinco”.
El arresto pone fin a lo que se había convertido en una redada cada vez mayor que había crecido a más de 250 personas de múltiples jurisdicciones y se habían ofrecido 80.000 dólares en recompensa.
El martes por la mañana, el FBI había dicho que Oropeza “podría estar en cualquier lugar”, subrayando cómo los investigadores trataron durante días de tener una idea de su paradero y reconocieron con franqueza que no tenían pistas.
El aviso que finalmente puso fin a la persecución llegó a las 5:15 p. m., y poco más de una hora después, Oropeza estaba bajo custodia, dijo el agente especial adjunto del FBI a cargo, Jimmy Paul. El presunto atacante es un ciudadano mexicano que ha sido deportado cuatro veces entre 2009 y 2016, según funcionarios de inmigración de EEUU.
Connor Hagan, un vocero del FBI, dijo que no revelaría la identidad de la persona que llamó para informar, una de las más de 200 pistas que dice que recibieron los investigadores. Las autoridades no dijeron quién era el dueño de la casa, si Oropeza los conocía o si alguien más estaba adentro cuando lo encontraron.
Tampoco dijeron si amigos o familiares habían ayudado a Oropeza a evadir la captura, o dónde había estado desde que huyó de la escena en Cleveland, que según las autoridades probablemente fue a pie.
Hagan dijo que las tres agencias que fueron a arrestar a Oropeza fueron los Alguaciles de EEUU, el Departamento de Seguridad Pública de Texas y el equipo BORTAC de la Patrulla Fronteriza de EEUU.
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