“Como dije en mayo, avanzaremos con el proceso de apertura de un consulado como parte de la profundización de esos lazos con los palestinos”, dijo el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, durante una conferencia de prensa el miércoles. Pero no llegó a proporcionar una línea de tiempo.

Estados Unidos apoya los esfuerzos para promover una paz duradera en Oriente Próximo, agregó Blinken, y continuará “fortaleciendo todos los aspectos de la asociación entre Estados Unidos e Israel”.

Los comentarios del máximo diplomático estadounidense siguieron a su reunión con el primer ministro alterno y ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Yair Lapid, y el ministro de Relaciones Exteriores de los Emiratos Árabes Unidos, el jeque Abdullah bin Zayed Al Nahyan.

El consulado de Estados Unidos en Jerusalén ha estado cerrado desde 2019 y los asuntos palestinos han sido manejados por la embajada.

En mayo, Blinken anunció el plan de Estados Unidos para reabrir su consulado durante una visita a Ramallah en la ocupada Cisjordania, donde mantuvo conversaciones con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas.

Israel se había opuesto al plan de Washington, calificando la reapertura como una “mala idea”.

A principios de septiembre, Lapid dijo a los periodistas en una conferencia de prensa: “Sabemos que la administración [de Biden] tiene una forma diferente de ver esto, pero como está sucediendo en Israel, estamos seguros de que nos están escuchando con mucha atención”.

La Administración Biden ha dicho repetidamente que una solución de dos Estados es la mejor manera de garantizar el futuro de Israel como un Estado judío y democrático que vive en paz junto a un Estado palestino viable, soberano y democrático.