Los dos líderes subrayaron la necesidad de evitar una escalada de violencia en la región, que ha sido testigo de airadas manifestaciones en algunos países de Oriente Medio por una explosión en un hospital de Gaza que los palestinos atribuyeron a Israel.

Israel niega haber llevado a cabo el ataque y el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que las pruebas estadounidenses apoyaban la versión de que fue causado por un lanzamiento fallido de cohetes por parte de combatientes palestinos.

“Estaremos con usted en solidaridad con su pueblo y su derecho a defenderse, a devolver la seguridad a su país y a su pueblo, a garantizar el retorno seguro de los rehenes que han sido tomados”, dijo Sunak en una parte televisada de la reunión con Herzog.

“Los palestinos son víctimas de lo que ha hecho Hamás. Es importante que sigamos proporcionando acceso humanitario”, agregó.

Al menos siete ciudadanos británicos han muerto y nueve siguen desaparecidos desde el ataque a Israel, dijo el miércoles el portavoz de Sunak.

Herzog dio las gracias a Sunak y dijo que su presencia ofrece una “especie de apoyo al hecho de que estamos allí para desarraigar las capacidades militares de este enemigo, para que podamos traer de vuelta a gente decente, honesta e inocente a vivir de nuevo en la frontera y vivir en paz con nuestros vecinos palestinos”.

Sunak es el último dirigente occidental que visita Jerusalén no sólo para mostrar su apoyo a Israel, sino también para intentar negociar una vía que garantice la liberación de los rehenes tomados por Hamás y proporcione ayuda humanitaria a los habitantes de Gaza.