La historia política de México continúa su curso y nos encontramos en un momento fascinante y lleno de incertidumbre. El Grupo Atlacomulco, conocido por su poder e influencia en el Estado de México, parece estar llegando a su fin.
Desde su fundación en 1942 por Isidro Fabela, el Grupo Atlacomulco ha sido un actor destacado en la política mexicana. Sus líderes recientes, como Carlos Hank González y Enrique Peña Nieto, han dejado una huella imborrable en diversos ámbitos. Pero las recientes elecciones en el Estado de México han sacudido el panorama político y podrían marcar un punto de inflexión en esta historia.
El Grupo Atlacomulco ha sido el centro de atención durante estas elecciones, con una participación ciudadana notable y sin incidentes reportados hasta el momento. La incertidumbre sobre su futuro es palpable en el aire. ¿Será este el momento en que se materialice su desaparición definitiva? Las apuestas están en marcha.
Es importante recordar las raíces del Grupo Atlacomulco, vinculadas a una profecía que anunciaba la llegada de seis gobernadores del Estado de México y un presidente de la república provenientes de esa región. Enrique Peña Nieto alcanzó la presidencia y los seis gobernadores ejercieron su mandato desde 1942. Así comenzó el ascenso de este grupo político, liderado por figuras destacadas como Carlos Hank González.
Carlos Hank González, un verdadero ícono del Grupo Atlacomulco, dejó un legado imborrable en la política mexicana. Su influencia trascendió más allá de ser gobernador del Estado de México, incursionando en el ámbito empresarial y religioso. Hoy, su monumento en Toluca nos recuerda su poder y presencia en el pasado.
Sin embargo, a lo largo del tiempo, el Grupo Atlacomulco ha enfrentado desafíos y momentos de decadencia. Recordemos el gobierno de Arturo Montiel Rojas, con casos de corrupción y enriquecimiento ilícito que lo empañaron. Ahora, en estas elecciones de 2023, nos encontramos ante un posible capítulo final para esta influyente agrupación. ¿Será Alfredo del Mazo Maza (el tercero de la dinastía del Mazo) el último gobernador asociado a este grupo político? Las cartas están sobre la mesa.
Mientras el Grupo Atlacomulco se prepara para escribir su epílogo, el Grupo Texcoco emerge como una nueva fuerza política en el Estado de México. La victoria histórica de Delfina Gómez Álvarez sobre la candidata del PRI marca el fin de casi un siglo de dominio priista en la entidad y abre paso a un nuevo escenario político.
El término “Grupo Atlacomulco” ha sido objeto de debates y controversias en el ámbito político mexicano. Algunos argumentan que es un grupo poderoso que ha influido en gran medida en la política nacional incluso vinculado a la masonería, mientras que otros sostienen que se trata de una especulación exagerada y que no existe una organización formal con ese nombre. Es necesario tener en cuenta esta diversidad de opiniones al analizar el tema.
En contraposición al Grupo Atlacomulco, surge el Grupo Texcoco como una nueva fuerza política. Figuras como Delfina Gómez, Higinio Martínez y Horacio Duarte, con una trayectoria en la política local y habiendo pertenecido al Grupo de Acción Política (GAP), son caras públicas de este grupo emergente.
El GAP, una corriente interna del PRD surgida en los años 90, logró consolidarse en la zona oriente del Estado de México, especialmente en municipios como Texcoco, Ecatepec y Nezahualcóyotl. Higinio Martínez Miranda, uno de los principales fundadores, lideró el movimiento junto a otros destacados miembros. Cuando Morena obtuvo su registro como partido político en 2014, el GAP utilizó sus estructuras para posicionarse como una fuerza dominante dentro de la organización en el Estado de México.
Esta estrategia permitió al Grupo Texcoco ganar terreno en la política estatal, consolidando su peso en diversos municipios. Ecatepec, Acolman, Naucalpan, Cuautitlán Izcalli, Tultepec, Tultitlán, Valle de Chalco, Chimalhuacán, Nezahualcóyotl, Texcoco, Chiconcuac, Tizayuca, Toluca y Atizapán de Zaragoza son solo algunos de los lugares en los que han logrado posicionarse.
El ascenso del Grupo Texcoco respaldado por Morena marca un hito en el panorama político estatal. Sin embargo, es importante recordar que la formación de grupos políticos no debe verse como algo negativo en sí mismo. La diversidad de corrientes y la competencia democrática contribuyen a un sistema político más plural y representativo.
Finalmente, debemos considerar que estamos siendo testigos de un nuevo capítulo en la historia política de México con la posible desaparición del Grupo Atlacomulco. Independientemente de nuestras opiniones sobre su legado, es innegable que este grupo ha dejado una marca duradera. La victoria de Delfina Gómez y el Grupo Texcoco en el Estado de México representa un cambio significativo en el panorama político estatal.
Ahora, nos toca esperar y descubrir qué rumbo tomará el país sin la presencia dominante del Grupo Atlacomulco, situación que Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, ya festeja, pero esa es otra historia.
Los próximos meses serán esclarecedores y permitirán determinar el impacto real de esta transición en la vida política de México. ¡Prepárense para una nueva era política en el Estado de México!
David Gamboa
Mercadólogo por la UVM. Profesional del Marketing Digital y apasionado de las letras. Galardonado con la prestigiosa Columna de Plata de la APCJ por Columna en 2023. Es Editor General de ADN A Diario Network.
