Primero lo primero y antes de iniciar a contarles el testimonio de una persona cercana a mi sobre la peor experiencia racista que ha vivido quiero dejar en claro que día a día las personas afrodescendientes seguimos siendo objeto de burla, racismo y discriminación, una de las más comunes es el racismo silencioso, ese que no siempre es evidente o explicito pero que tiene un impacto profundo y dañino en la vida de quien lo sufre.
Me di a la tarea de visitar a varios miembros de mi comunidad para conocer sus historias y hay una en particular que me estremeció.
Azucena es una mujer negra, muy bonita originaria de Oaxaca, llego a ciudad Juárez a la edad de 16 años en los 90’s, la vida de ella en su ciudad natal era de lo más normal, tenía muchos amigos y cursaba el tercer semestre de preparatoria, todo parecía de lo más normal hasta que sus papas le dieron una inesperada noticia, a su papa le platicaron que aquí en la frontera había mucho trabajo así que debido a la situación económica que estaban pasando decidieron que lo mejor era venir a buscar una mejor vida. Para ella fue un cambio muy fuerte ya que se encontraba en una etapa donde ya de por si es complicada ahora tener que cambiar toda su vida de la noche a la mañana era mucho que digerir, llego a la ciudad ¿y cuál fue su sorpresa? Que no seguiría sus estudios, sus padres la metieron directamente a trabajar como operadora en una maquila donde si la aceptaron a su corta edad. ella y su familia vivían en un departamento pequeño en el poniente de la ciudad, hasta ahí para ella todo era normal todavía, casi no salía de su casa por lo peligroso de la época para las mujeres así que el único lugar donde podía relacionarse con más personas era la maquila y pues ahí había paisanos y amigos de otros estados como Veracruz y Coahuila así que siempre se sintió igual a los demás hasta que tomo la decisión de seguir sus estudios, como ya habían pasado un par de años busco una opción donde pudiera estudiar y trabajar así que ingreso a una preparatoria abierta que estaba por la Vicente guerrero donde todo estaba por cambiar.
En su primer día en la escuela sintió un rechazo por los compañeros incluso algunos profesores quienes no perdían oportunidad de hacer algún tipo de chiste hiriente por su color de piel y acento al hablar, así paso dos semestres, ella trato de ser de bajo perfil para no llamar la atención, pero aun así siempre la molestaban, ahí conoció a quien sería su primer novio, vamos a llamarle Alberto, el empezó a mandarle cartitas y a tener atenciones con ella que nadie más había tenido, él era de tez blanca y clase media y pues a ella se le hacía bastante atractivo así que rápido se ilusiono con él, al poco tiempo empezaron a salir pero ella no se daba cuenta que siempre eran a lugares lejanos de su entorno, no convivían casi con nadie tal pareciera que el escondía la relación ya que le daba pena que lo vieran con ella, pero en ese momento ella no se daba cuenta. Así paso un año hasta que ella quedo embarazada y al enterarse sus padres le pidieron conocer a su novio ya que nunca lo habían visto, ella le dijo y él no se negó a la responsabilidad y él también la llevo a a conocer a su familia, obviamente fue una sorpresa ya que no sabían nada de ella y cuando la vieron por primera vez le hicieron muchas preguntas sobre su origen, parecía que la mama de Alberto estaba molesta, cuando empezó a notarse su embarazo Alberto se la llevo a vivir a casa de sus papas y ella estaba feliz sin saber las humillaciones que le esperaban.
Al principio todo normal hasta que la mama de Alberto le empezó hacer comentarios hirientes de cómo era posible que su hijo se fijara en una persona como ella, el tan guapo y ella pues así negra e ignorante, así empezó el abuso cuando menos pensó ya era la sirvienta de aquella casa, no salía para nada, incluso la mama permitía que Alberto tuviera otras parejas con tal de alejar a la mujer negra de sus vidas, al poco tiempo Azucena dio a luz a un precioso bebe morenito, pero Alberto ya no estaba ahí, nadie fue por ella al hospital así que regreso a casa de sus papas, cuando se recupero fue a buscar alguna explicación y lo único que encontró fue insultos y humillaciones por parte de la mama de Alberto, además de que se enteraría que él se había ido de la ciudad ya que se había casado con otra persona digna de él.
Azucena regreso al trabajo y como pudo termino la prepa y gracias a eso ella pudo subir de nivel en la empresa donde trabajaba, ella me cuenta que no sabía lo terrible que era ser negra, porque nunca se había sentido así, jamás nadie le había hecho sentir que no valía nada por el color de su piel, su autoestima quedo hecha pedazos y aun trata de superar ese episodio que le rompió algo por dentro, con esta frase finalizo su historia “ si alguien me conoce sabe que no estoy dispuesta a ser señalada, recriminada ni criticada por nadie, porque no soy culpable de nada”.
El testimonio de Azucena refleja la cruel realidad del racismo silencioso y las múltiples formas de discriminación que enfrentan las personas afrodescendientes en su vida cotidiana. A través de su historia, queda evidente cómo se manifiestan los prejuicios en aspectos tan íntimos como las relaciones personales y familiares, y cómo impactan en la autoestima y bienestar emocional de quienes lo sufren.
Desde su llegada a una nueva ciudad, Azucena enfrentó la desilusión de ver truncados sus sueños educativos y la confrontación con un entorno hostil que no la aceptaba. Su relato destaca no solo el dolor de ser objeto de burla y desdén, sino también el profundo deseo de encontrar pertenencia y amor. La relación con Alberto, que inicialmente parecía prometedora, se convirtió en una fuente de humillación y rechazo, poniendo de manifiesto los obstáculos que el racismo y los estereotipos pueden representar en una relación romántica.
El recorrido de Azucena también resalta la resiliencia. A pesar de las adversidades, logró culminar su educación y avanzar en su carrera, recordándonos que el empoderamiento y la superación son posibles incluso en medio de situaciones abrumadoras. Su historia invita a la reflexión sobre la importancia de apoyar a quienes enfrentan discriminación y de crear un ambiente donde todos puedan ser valorados por lo que son, más allá de los prejuicios de color de piel o estatus social.
Es fundamental que sigamos conversando sobre estos temas, promoviendo espacios donde se pueda hablar abiertamente sobre el racismo y todas sus formas, impulsando un cambio hacia una sociedad más inclusiva y justa. Como Azucena afirma, es crucial no permitir que otros nos hagan sentir menos por quienes somos. Su testimonio es un llamado a la solidaridad y a la lucha contra cualquier forma de discriminación.
Ángeles Gómez
Fundadora en 2014 de Ángeles Voluntarios Jrz A.C. dedicada al desarrollo de habilidades para la vida en la niñez y juventud del sur oriente de la ciudad. Impulsora del Movimiento Afromexicano, promoviendo la visibilización y sensibilización sobre la historia y los derechos de las personas afrodescendientes en Juárez.