“Modificación en la alineación del equipo de Morena…” Diría un comentarista de fútbol.
El domingo 22 de septiembre, en el seno del Congreso Nacional de Morena, 300 concejeros, eligieron a sus nuevos líderes.
Las figuras relevantes fueron LUISA MARÍA ALCALDE LUJÁN, ex secretaria de Gobernación, como presidente del partido; y Andrés Manuel López Beltrán, ¡hijo del presidente López Obrador!, como secretario de organización electoral.
Nomamespancho, ¡es inaudito!
No es que el junior no tenga derecho a aspirar un cargo dentro de la política nacional.
Sino que representa justamente todas las imputaciones que achacó su padre a los conservadores durante seis años.
Inmorales, deshonestos, corruptos, impúdicos. ¡Piensan que somos iguales! Decía.
Cubiertos por un ligero tejido de integridad, los morenos justifican el arribo de “ANDY”, al partido.
“No hay nepotismo, AMLO dijo que mientras él estuviera en el poder, no habría un familiar suyo en la política nacional. Y lo cumplió.” Lo justifican.
Sin embargo, por más que quieran cubrir esta ominosa y desafortunada jugada, para mí, son parte ya de la propaganda del engaño.
Amantes de la mentira y la manipulación.
Hijos bastardos de la posverdad.
O sea, los que profesan en su devenir, la constante falta de respeto y desprecio a la verdad.
En su discurso, LUISA MARÍA ALCALDE recalca que en su gestión, no habrá, compadrazgos, amiguismos ni nepotismo, y sin voltear a ver el germen que le fue impuesto, trata de reconstruir una versión diferente a la verdad para manipular a la militancia, y peor, al pueblo “sabio” que sostiene la causa morenista, para luego propagarla sin ápice de pudor.
La posverdad es un
fenómeno que ha ganado relevancia en los últimos años.
Aunque no es lo mismo que la mentira, comparten características relacionadas con el engaño y la manipulación.
Permítanme explicarles más al respecto:
Definición de Posverdad:
La posverdad se refiere a la falta de respeto por la verdad o el desprecio hacia la misma.
A diferencia de la mentira, donde el mentiroso oculta intencionadamente la verdad, en la posverdad se ignora el juego de la verdad y se obvia su existencia.
Es un término que se ha popularizado en la era de las redes sociales, donde la viralización de mensajes y la dificultad para reconstruir la verdad de los hechos han contribuido a su propagación.
Características de la Posverdad:
Ignorancia.
En tiempos de posverdad, se ha dejado atrás la verdad. La verdad es ignorada y despreciada.
Charlatanería.
El charlatán, figura central en la posverdad, menosprecia la verdad y habla sin cesar, produciendo discursos.
Aunque no es un mentiroso, su actitud es perturbadora y representa el inicio de la posverdad.
Desinformación y Fake News.
La posverdad está relacionada con la propagación de noticias falsas y la manipulación mediática.
Cosa que seguramente veremos en el futuro.
Por lo pronto, entra en funciones, ANDY, (el embrión siniestro) quien tendrá el poder de palomear candidaturas en todo el país para las elecciones del 27.
Qué meyo.
Raúl Ruiz
Abogado. Analista Político. Amante de las letras.
CARTAPACIO, su sello distintivo, es un concepto de comunicación que nace en 1986 en televisión hasta expanderse a formatos como revista, programa de radio y redes sociales.
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