Solo los hombres de ciencia y de virtud son capaces de impulsar el progreso.
Cuando el trabajo y el estudio de un hombre han estado constantemente sometidos a la crítica constructiva del crisol hirviente de la experiencia social y las generaciones han certificado por unanimidad el beneficio a la humanidad, a la sociedad y a las familias: esto hombre se convierte en una Institución.
Por esta razón y dignamente los chihuahuenses coinciden en reconocer a ese hombre transformado en Institución a esa Institución reproducida en la persona del Doctor Lorenzo Antonio Duran Meléndez, catedrático e investigador de la Facultad de Zootecnia y Ecología de la Universidad Autónoma de Chihuahua.
Los procesos naturales se desenvuelven por sí mismos y los procedimientos sociales deben desarrollarse con justicia; de estas formas y por estos motivos, la comunidad estudiantil, el personal docente, trabajadores y administrativos de la Facultad de Zootecnia y un gran sector de la sociedad chihuahuense han invitado y generado un sólido, firme y constante apoyo al Doctor Duran en la postulación e impulso al desarrollo de su candidatura a la Dirección de la Facultad.
Por el respeto debido a mis amables y generosos lectores es necesario explicar el fundamento que justifica el argumento principal de este trabajo: las personas y los eventos de un lugar y de un tiempo determinado carecen de consideración del que esto escribe; al contrario, considero de vital importancia los principios y los valores de las personas cuando trascienden a su tiempo y a su lugar, considero también, de suma significación cuando las causas y consecuencias de los eventos van más allá de su momento y de su región. Mis estimados lectores, estos son los dos fundamentos que justifican este trabajo suplicando su comprensión: los principios y valores del Dr. Duran y su obra trasciende a nuestro tiempo y a nuestro espacio.
La historia de la Facultad de Zootecnia registra la obra del Dr. Duran en dos grandes vertientes:
La científica: la forman la actitud permanente y constante del Dr. Duran para inculcar en el estudiante la admiración, el asombro y la fascinación en los fenómenos naturales y así despertar el interés en la investigación de las causas y los efectos de cada etapa que integran el desarrollo de los fenómenos naturales y así obtener el conocimiento necesario para que el hombre se aproveche justamente de los recurso naturales para la satisfacción de sus necesidades naturales.
La virtuosa: esta característica del Dr. Duran la integran el constante trabajo y estudio exhaustivo en la búsqueda del mejoramiento en su persona y en sus estudiantes en beneficio de la sociedad; una actitud de apertura para las opiniones diversas con el afán de crecer todos; una postura de servir a la sociedad en lo personal y por medio de la institución; la búsqueda del desarrollo de nuevos programas académicos; y un sinfín de actividades individuales y de grupo que pretenden el beneficio del hombre considerado individualmente y en sociedad.
Para terminar este trabajo es menester insistir en la vital necesidad de que un hombre con experiencia probada enérgicamente por la crueldad de los hechos y con un pensamiento demostrado de servicio en beneficio a la sociedad y al individuo; un hombre con la herramienta fría y exacta de la ciencia en la mano capaz y listo para escudriñar la naturaleza en beneficio de la sociedad y del individuo; un hombre que ha luchado constante y exhaustivamente por encontrar y engrandecer las virtudes propias y de sus alumnos también en beneficio de la sociedad y del individuo. Solo un hombre así genera progreso, la Dirección de la Facultad de Zootecnia y Ecología de la Universidad Autónoma de Chihuahua lo necesita: Doctor Lorenzo Antonio Duran Meléndez.
Es cuanto ¡un abrazo fraterno!
Guillermo Chávez
Abogado. Filósofo. Columnista.
Buen amigo y consejero, entusiasta. Publicamos cada semana tu columna, en tu espacio en tu memoria.
Descansa en Paz.
Hasta pronto querido amigo.