La gente común y corriente, piensa que el funcionario público, ha sido designado para trabajar en pos de la sociedad. Del pueblo.
En su ingenuidad, supone que el funcionario debe entregar todo a favor de la ciudadanía.
La composición de un gabinete tiene, desde luego, esa responsabilidad. Sin embargo existe una multitud de variables en el ejercicio del poder, que deterioran esta importante finalidad de la función pública.
Anote usted algunas de ellas: el desconocimiento de la materia, la holgazanería, la falta de oficio político, y otros distractores más.
Un mandatario “media cuchara”, construye su gabinete con amigos, compadres del alma, y piezas que le van acomodando sus compromisos políticos.
Un gran error si quisiera permanecer en el poder.
Un mandatario con oficio y con visión, diseña muy bien la estructura de su gabinete y contrata a los elementos con mejores habilidades para el desempeño de su función, pero además, con otras características que le impriman el plus para avanzar en proyectos ulteriores.
Es muy común observar que un gobernador, o un alcalde, o el mismísimo presidente de la república, hagan una remuda de funcionarios a la mitad de su administración.
Si lo hacen para reforzar el equipo, están haciendo lo que se llama el uso político del gabinete. Pero si sacan una pieza y la reemplazan con otra igual de inútil, están perdiendo la oportunidad de avanzar.
Veamos estas modificaciones en el gabinete de Javier Corral.
René Almeida Grajeda estará en la Secretaría de Desarrollo Rural, cargo que era ocupado por Rubén Chávez Villagrán. ¿Puede “reactivar” el sector?
Carlos González Herrera fue nombrado nuevo secretario de Educación y Deporte, en sustitución de Pablo Cuarón Galindo. Sin duda una gran decisión.
Gustavo Elizondo será el nuevo titular de Comunicaciones y Obras Públicas, en reemplazo de Norma Ramírez. ¿Es en verdad una pieza de ayuda para su gobierno? Muchos lo dudamos.
Ramón Galindo Noriega como subsecretario de Desarrollo Social en Juárez. Un cargo de impacto territorial que será desaprovechado en esto de la utilidad política.
Veamos ahora el rediseño en la Secretaría General de Gobierno. Se separa Transporte y Gobernación, por lo que se creará una Subsecretaría de Gobierno en Chihuahua capital, la cual realizará las tareas propias de la gobernación de la entidad, y ahí estará Luis Fernando Mesta. ¿Que objetivo tiene esta subsecretaría?
Otros nombramientos fueron: Elías Humberto Pérez Holguín como nuevo director general de Administración de Hacienda; cargo meramente burocrático, de utilidad, siempre y cuando no le metas mano al cajón.
Javier Palacios Reyes, como director general de Tránsito y Vialidad; ni fu ni fa.
David Holguín Baca, director general de Transporte; de gran impacto social si se entrega un servicio digno, seguro, barato y eficaz.
Ulises Pacheco será titular del secretariado ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad. ¿Habrá proyecto? ¿Coordinación? ¿Resultados?
Lucero Nieto estará como directora del Instituto Chihuahuense de la Juventud. ¿Haciendo qué? Un instituto que no ha servido de mucho a la juventud.
y Laura Marín Franco la nueva recaudadora de rentas en Ciudad Juárez. Sustituye a Sergio Nevarez, quien hizo buen papel pero en lo político se echó muchos enemigos encima.
Hay que recordar que en el ejercicio del poder, los cargos públicos son para ayudar. Para hacer amigos.
De frente al 2021, quienes aspiren a la gubernatura, o alcaldías, deberán pensar en los personajes que podrían acompañarlos en ese proyecto con los perfiles adecuados.
La patria os lo demandará.
Raúl Ruiz
Abogado. Analista Político. Amante de las letras.
CARTAPACIO, su sello distintivo, es un concepto de comunicación que nace en 1986 en televisión hasta expanderse a formatos como revista, programa de radio y redes sociales.
Suscríbete a XPRESSNEWS.MX y recibe la columna los lunes y miércoles gratis en tu correo además de otro contenido de interés.
Las opiniones expresadas por los columnistas en la sección Plumas, así como los comentarios de los lectores, son responsabilidad de quien los expresa y no reflejan, necesariamente, la opinión de esta casa editorial.