Estamos atascados entre la escarpa de las retro-definiciones, y las neo-conceptualizaciones “ideológicas”.
Antes, las palabras tenían un significado sólido, y hoy lamentablemente, suenan ligeras.
Los pensadores planteaban sus ideas con suma claridad.
Y la masa se identificaba con unos o con otros, según su propia convicción.
Luego, las definiciones dadas en otros tiempos, dejaron de corresponder al ideario de la gente.
Hasta que murieron las ideologías.
Y en la descomposición, los sistemas mutaron y se convirtieron en la herramienta del gobierno hegemónico en turno para proteger los intereses de los grupos en el poder.
Al arribo de el nuevo gobierno, representado por Andrés Manuel López Obrador, el propósito por derrumbar lo establecido, obliga a sus intelectuales orgánicos a redefinir un modelo que los identifique con la población.
Ojo con esto:
Andrés Manuel, en un balbuceo por acuñar su nuevo modelo económico para la nación, anuncia que en su administración se termina con las prácticas de la política neoliberal que afectaron al país y que se construirá una propuesta post neoliberal, como un modelo viable de desarrollo económico, ordenamiento político y de convivencia entre los sectores sociales.
…”declaramos formalmente, desde Palacio Nacional, el fin de la política neoliberal”. Precisó.
En la Neo conceptualización a la que me referí al inicio del texto. López Obrador identifica la política económica neoliberal con las siguientes características:
1. Por el pillaje,
2. Por ser antipopular,
3. Por ser excluyente.
Pero no alcanza todavía a esbozar el suyo propio con el sello de la casa.
Por lo pronto lo ubica como un modelo post neoliberal.
En cuya “modernidad”, (así le llama al futuro de México bajo el nuevo régimen) acomoda los principios del nuevo modelo… Columna vertebral de la Cuarta Transformación.
Modernidad que puede ser forjada desde abajo sin excluir a nadie, y que el desarrollo no tiene porqué ser contrario a la justicia social.
Los conceptos básicos que proclama para avanzar hacia la mencionada modernidad son: la honradez y la honestidad, en donde la honestidad implica, además de no robar, el ser consecuente y actuar como se piensa, ser congruentes.
El proyecto va en serio. No es todavía un “producto” acabado, apenas lleva cien días gobernando.
El balbuceo intelectual es eso, un balbuceo, pero trae consigo el poder de la perrada que lo apoya.
Y sus adversarios aún no dimensionan la fuerza del tsunami.
Los ESCENARIOS futuros traerán novedades como los camaleosaurios, especies en plena transformación; una nueva estirpe de zalameros; y desde luego una variable de corrupción, muy Morena.
Raúl Ruiz
Abogado. Analista Político. Amante de las letras.
CARTAPACIO, su sello distintivo, es un concepto de comunicación que nace en 1986 en televisión hasta expanderse a formatos como revista, programa de radio y redes sociales.
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