Amigos mios, esta historia dolorosamente verídica la escribí en febrero del 2015. Es un relato triste, que se da con frecuencia en muchos hogares y las víctimas son mujeres jóvenes en su mayoría. Si tienen una situación parecida, espero que tengan la fortaleza de la protagonista para vencer las adversidades y emerjan triunfantes, no es fácil, sin embargo, nadie ha dicho que la vida sea fácil.
“La mujer de hierro”
Una personalidad como la de Yolanda es producto de una predisposición genética primero, luego de golpes de martillo en la fragua de la vida, que moldean el carácter, que endurecen el alma, que templan una coraza de acero para protegerse de las agresiones del exterior -humanas por desgracia-.
Ella, era una bellísima niña de una familia de clase media, contaba con tres hermanas menores que aunado a su carácter protector, significó que hiciera el papel de pequeña madre con ellas. Tenía además un hermano dos años mayor que ella, mismo que en una familia machista, fue el único que cursaba su educación primaria en un colegio privado y religioso. Mientras que ella y sus tres hermanas, lo hacían dentro de la educación pública.
En una visita a la ciudad de Zacatecas -lugar de origen de sus padres- y contando Yolanda con tan sólo doce años de edad, en un parque cercano al domicilio de sus familiares donde se hospedaban, hubo un conflicto por la posesión de los columpios. Sus hermanas fueron desalojadas por la fuerza por unas “Señoras gordas”, al percatarse de ello, convertida en una tigresa agredió contundentemente a las abusonas. propinándoles una severa golpiza.
Se hizo un escándalo y todo mundo fue a parar a una delegación de policía, los que se asombraron de que una pequeña menor de edad, dejara en tan lamentables condiciones a tres señoras mucho más corpulentas. Al aclararse los hechos y por su minoría de edad, Yolanda y sus hermanitas fueron liberadas. Para finalizar el bochornoso episodio, los policías preguntan, ¿pues de dónde vienen ustedes? De Juárez responden, ¡con qué razón! Comentan los uniformados.
La debacle familiar comenzó, cuando su padre Roberto se separó de Elisa, su madre. Él, era de una conducta bastante relajada, procreando hijos por docenas con diferentes mujeres. No dejó totalmente desamparada a la familia, les daba una pequeña cantidad de dinero -insuficiente- y trabajo a su hermano José Luis en su comercio.
Su madre Elisa, hubo de cruzar el Río Bravo, para trabajar en El Paso Tx. como empleada doméstica, y Yolanda a la edad de 13 años debió de llevar la responsabilidad de la casa. Toma además un pequeño curso de corte de cabello, entrando a trabajar casi de inmediato a un peinador, en esos tiempos se les denominaba “Salón de belleza”.
Con su hogar paterno desecho y sin ninguna dirección -aunque era una excelente niña-adolescente- a los 14 años entabla una relación de noviazgo con un pendejete llamado Luis, el que aprovechándose de su inocencia la seduce y embaraza. Cuando por boca de ella misma, lo sabe su madre Elisa y su hermano José Luis, cometen estos un grave error, presionan al infeliz para que repare su falta casándose con Yolanda.
A sugerencia de sus padres, Luis no se casa con ella, sólo la lleva a vivir a su casa paterna. como era de esperarse su vida se convirtió en un verdadero calvario para la niña hecha mujer prematuramente. La tratan de la peor manera y finalmente al cabo de cuatro meses, la expulsan de ahí de manera humillante.
Ese tipo de familias, no producen hijos sino bestias sin sentimientos. Yolanda sin haber cumplido aún los 15 años y con 5 meses de embarazo, después del injusto trato de sus suegros regresa a vivir a su casa. Sólo para recibir un trato brutal de su madre Elisa, la que con odio hacia los hombres descarga su ira en ella y en su hermano José Luis.
Con repetidas y crueles golpizas por motivos baladíes.
Más doloroso que las palizas, era el trato inhumano de su madre lo que más la hería. Elisa no era mala, era solo ignorante no comprendiendo que su hija no era la peor del mundo como le llamaba. Ofendiendola además con esa palabra de cuatro letras tan degradante y totalmente improcedente para la joven.
Finalmente, da vida a una hermosa niña a la que pone el nombre de Brianda. Y… ahí va Yolanda a luchar por sí misma y por su pequeña hija. Elisa se apropia de Brianda y la esgrime como un arma en contra de Yolanda, para ofenderla, para humillarla. Causándole graves heridas en su auto estima y en su flagelada alma.
Yolanda siempre fue una joven madre honesta, manteniendo una vida casi virtuosa después de tan terrible experiencia. Iba a cumplir 18 años cuando conoce a Guadalupe -parapetado bajo el falso nombre de Ricardo- un buen hombre, aunque modesto y exento de toda gracia física, quizá fue lo que la hizo elegirlo.
Contraen matrimonio civil, y fue ahí donde supo que el contrayente no se llamaba Ricardo sino Guadalupe. En compensación el primer hijo de la pareja si se llama “Realmente” Ricardo. Procrean dos hijos más, un varón y una niña. Su vida transcurre con muchas limitaciones económicas debido a que Guadalupe era un modesto carpintero y Yolanda sólo obtenía trabajos pésimamente mal remunerados.
De los cinco hermanos que son en la familia de Yolanda, tres de ellos son profesionistas y una más tiene carrera técnica. Sólo Yolanda se quedó con sus estudios primarios. pero… la vida no entiende de melindres, y aun cuando todos ellos viven bien económicamente, Yolanda es la más próspera, renta equipos para fiestas y su pequeña empresa le da magníficas utilidades.
En ocasiones tiene ataques de llanto al recordar la forma inhumana en que fue tratada por su propia madre y en llanto vivo dice, “Sí la quiero pero no puedo perdonarla”. Se ha vuelto una mujer impositiva, calculadora y fría en los negocios, así la hizo el sufrimiento, ¡así la hizo la vida!
Elisa, tiene su infierno personal con un niño que le dieron recién nacido -hoy un hombre de 26 años-, quien la está haciendo pagar por sus equivocadas acciones. Es un bueno para nada, a él que se le ha dado todo. Es un vicioso, haragán y mantenido. La familia teme que en determinado momento atente contra la vida de Elisa.
Libro recomendado de la semana
Esta vez el elegido es “Detrás de la lluvia” del autor español Joaquín M. Barrero. Es una novela conmovedora, histórica y policiaca que seguro no olvidarán. La historia cobra su cenit durante la cruenta Guerra Civil Española y luego la participación de España como aliada de Alemania en la Segunda Guerra Mundial, de ahí su carácter histórico. Enmedio de dos vidas entrelazadas por una entrañable amistad, hay historias de amor y bondad adyacentes. Sus personajes tienen una gran fuerza y la maestría narrativa del autor es una seducción a la prosa. El final es asombroso debido al meticuloso trabajo de investigación y documentación del autor, amén de una envidiable memoria. Háganse un favor leyendo esta obra, la cual no tiene desperdicio.
“Memoria selectiva para recordar lo bueno, prudencia lógica para no arruinar el presente, y optimismo desafiante para encarar el futuro”
– Isabel Allende
“En lugar de dejar tus sus dificultades y fracasos te desalienten, deja que te inspiren”
– Michelle Obama
“La pregunta no es quién me lo va a permitir, sino quién va a detenerme”
– Ayn Rand
José Cruz Pérez Rucobo
Lic. en Economía por la UACJ. Me dedico al comercio como medio de subsistencia y al periodismo y crítica política como ejercicio lúdico. Soy un hombre de izquierda por naturaleza, cualquier cosa que ello signifique.
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