La manifestación que un maestro de Chihuahua de la escuela Federal Emiliano Zapata realizó junto a sus estudiantes en el patio interior del Palacio de Gobierno exigiendo la entrega inmediata de los libros de texto, es un ejemplo de valor y civismo de un ciudadano que cumple con el deber de exigir por sus derechos y por los de las y los alumnos, de forma pacífica y con creatividad. Las niñas, niños y adolescentes deben saber que tienen derecho a expresar lo que piensan y sienten, y que manifestarse por injusticias es un derecho constitucional. Que nunca nos debemos de conformar cuando sabemos que los derechos se vulneran, ni cuando sabemos que se genera una gran violencia al dejarlos en el abandono con indolencia.
Este es un ejemplo para muchas personas que no se manifiestan por miedo a las represalias que la gobernadora del estado, está pronta y ansiosa de ejecutar. Solo basta leer el comunicado de la Secretaría de Educación y Deporte; que en primer término dice lo siguiente:
- “A través de las áreas correspondientes, se iniciará la investigación para determinar si las acciones realizadas por el profesor frente a grupo forman parte de la planeación que todo maestro debe elaborar durante el ciclo escolar”.
Al respecto comento que no es posible que el gobierno piense que las maestras y maestros, así como las niñas, niñas y adolescentes se quedarán callados cuando ven que se pisotean sus derechos constitucionales, que sigan callados cuando ven que, en vez de recibir los libros de texto, reciben unos folletos mediocres, escuetos y faltos de contenido. ¿En verdad piensa la gobernadora que la sociedad Chihuahuense, es una sociedad a la que puede engañar o manipular con sus discursos simplones?
El comunicado también menciona que,
– “En este sentido, se analizará si se han infringido las políticas y reglamentos escolares, además se indagará si se contaba con la autorización de los padres de familia de los estudiantes”.
Me gustaría saber que políticas o reglamentos prohíben la libre manifestación de las y los maestros, así como de las niñas y niños, ante una situación que les impide tener una educación de calidad. El artículo 6 de nuestra constitución federal, a la letra dice:
La manifestación de las ideas no será objeto de ninguna inquisición judicial o administrativa, sino en el caso de que ataque a la moral, la vida privada o los derechos de terceros, provoque algún delito, o perturbe el orden público; el derecho de réplica será ejercido en los términos dispuestos por la ley.
Al parecer la SEyD, ignora las manifestaciones de niñas y niños alrededor del mundo. Ser niño, niña o adolescente, no significa que no puedan ejercer sus derechos humanos e incluso defenderlos, pues están reconocidos a nivel internacional y nacional no solo como sujetos de derechos sino como sujetos activos en la defensa de sus derechos.
Por otro lado, en el mismo comunicado la Secretaría dice que “la educación debe ser un espacio neutral en el que se promueva el pensamiento crítico y el respeto a las distintas opiniones”. Pero, ¿cómo puede ser un espacio neutral si no se tienen las mismas condiciones que en el resto del país?, si las y los niños de Chihuahua no cuentan con sus recursos para estudiar. Es aquí, donde debe entenderse que a una acción siempre habrá una reacción. Y en esta ocasión la reacción es ante una acción intolerante del gobierno del estado, y se reacciona de forma crítica, pues retener los libros de texto gratuitos, es un acto de violencia institucional.
Esto que sucedió hace unos días se agrega a todas las acciones que se han venido realizado por las y los Chihuahuenses, que ven una injusticia en los actos de la Gobernadora. Dos marchas de 5 mil personas, caravanas de diferentes municipios de Chihuahua, la recolección de 100 mil cartas de padres y madres de familia dirigidas a la gobernadora del estado exigiendo los libros de texto para sus hijas e hijos y otras 100 mil más para el presidente de México; más las otras 100 mil cartas entregadas el miércoles 4 de octubre en la SCJN al ministro que lleva el proyecto. Así como manifestaciones en diversas dependencias del estado de Chihuahua.
Pero todo esto no es suficiente para la gobernadora, María Eugenia Campos, que insiste en seguir usando su posición para coartar el derecho a la educación de las NNA en el Estado.
Este texto fue terminado el dio 4 de octubre, día en el que la SCJN, desahogará el proyecto de la controversia que tiene a los LTG secuestrados por la gobernadora en el estado de Chihuahua. Esperamos que para el día 5 de octubre los LTG, sean entregados por fin a quien corresponde, a las niñas, niños y adolescentes del estado de Chihuahua.
#LibrenLosLibros
Leticia Ortega Máynez
Ingeniera apasionada por las matemáticas y la investigación. Con doctorado en Manchester, ha contribuido al procesamiento de imágenes médicas. Además, ha participado activamente en movimientos sociales y políticos, abogando por los más vulnerables. Actualmente es Diputada Local por el Distrito 02 en Ciudad Juárez.
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