Es el desgarrador clamor de muchas mujeres en nuestro país, al ver que día con día un número creciente de mujeres son arteramente asesinadas bajo el tenebroso manto de la impunidad. Dejémoslo en claro, la prioridad #1 de todo gobierno de cualquiera de las tres esferas; local, estatal y federal es darle protección a sus habitantes, obligación que se incrementa al referirse a mujeres, ancianos y niños dada su evidente indefensión, como grupo vulnerable que es. Luego vendrán otros rubros como; salud, educación, vivienda, obras de infraestructura y otras muchas. Mencionaba el flagelo que representa la impunidad, los asesinos saben perfectamente que hacen sus barbaridades y que sólo un pequeño porcentaje (alrededor del 5%) pagarán por su crimen, debido a múltiples factores; deficiente estado de derecho, policías investigadoras mal preparadas, mala integración de expedientes, jueces que se venden al mejor postor y frecuente colusión del hampa con gente del gobierno.
Como se puede apreciar el panorama es desolador, las mujeres a nivel nacional están justamente “Encarboronadas” y han decidido tomar acciones contundentes como: “El Nueve Nadie se Mueve” o bien, “Un día sin Nosotras”. El día nueve de marzo es la fecha señalada para suspender todo tipo de labores a nivel nacional. Me conmueve la dignidad de nuestras valientes mujeres mexicanas. Me comentan mi esposa e hijas que incluso se suspenderán las clases en algunas escuelas y muchos centros de trabajo se unen a esa protesta dándoles el día, les digo que cuentan con todo mi apoyo y solidaridad, que ese día yo mismo haré mi comida y todo tipo de actividades que ellas realizan por mi, me siento orgulloso de su activismo y sentido de la justicia, aquí encuadran perfectamente unas cuantas ideas de la poesía hecha canción, “Te quiero” del inmenso uruguayo Mario Benedetti: “Te quiero porque tus manos trabajan por la justicia”, “Te quiero por tu mirada que mira y siembra futuro”, “Te quiero en mi paraíso, es decir que en mi país, la gente viva feliz, aunque no tenga permiso”, “Te quiero porque tu boca sabe gritar rebeldía”… en mi concepto, es de hombres muy hombres apoyar a las mujeres, el que entendió, entendió.
Bueno, bueno ¿y nosotros los hombres? Bien podríamos hacer un Paro Nacional precisamente el nueve de marzo, sin pretender despojar del protagonismo muy merecido de las féminas. Estoy convencido que si colapsamos la Economía un sólo día, el tirano que despacha en Palacio Nacional se tambaleará y quizá entienda que no se le eligió como dueño del país sino como empleado, es mandatario, no mandante. Podría darse un anhelado golpe de estado pacífico, sin derramamiento de sangre, como un país civilizado que somos. Los grandes empresarios, fuerzas armadas, industriales, inversionistas y los poderes fácticos, entenderían la fuerza de la sociedad y la conveniencia de deponer este sistema que tiene al país sumido en el caos, que México no es de un solo hombre y sus descabellados caprichos, y… seguramente actuarían en consecuencia.
“Un barco en un puerto está a salvo, pero no es para eso para lo que se construye un barco”
– Grace Hopper
“La sociedad solo cuida de uno mientras éste resulte rentable”
– Simone de Beauvoir
“No veo la miseria que hay sino lo bello que aún queda”
– Anne Frank
José Cruz Pérez Rucobo
Lic. en Economía por la UACJ. Me dedico al comercio como medio de subsistencia y al periodismo y crítica política como ejercicio lúdico. Soy un hombre de izquierda por naturaleza, cualquier cosa que ello signifique.
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