En el debate sobre la alimentación escolar, con la reciente prohibición de la comida chatarra en las escuelas de México, surge una pregunta fundamental: ¿estamos realmente ofreciendo a los niños una alimentación equilibrada o solo reemplazando lo malo con lo insuficiente?
Es un error pensar que simplemente eliminar los productos ultraprocesados y ofrecer frutas en su lugar es suficiente para garantizar una nutrición adecuada. Si bien las frutas son una fuente importante de vitaminas y fibra, los niños en edad escolar necesitan mucho más para su desarrollo. La proteína es fundamental para el crecimiento, la concentración y la energía a largo plazo. En este sentido, la eliminación del huevo y la falta de proteínas en algunas cafeterías escolares representa un retroceso, ya que es una de las fuentes de más completas y accesibles. Sustituirlo por opciones poco sustanciosas podría llevar a un aumento en el consumo de carbohidratos simples, afectando el rendimiento físico y mental de los estudiantes.
Es crucial que las autoridades escolares y los encargados del menú en las cafeterías se asesoren con nutriólogos especializados para garantizar que las opciones disponibles realmente beneficien la salud infantil. La alimentación en las escuelas no puede depender de decisiones basadas en tendencias o medidas superficiales, sino en evidencia científica que asegure una dieta balanceada. Incluir proteínas de calidad, grasas saludables y carbohidratos de buena fuente es esencial para la formación de hábitos saludables en la niñez.
Si de verdad queremos combatir la obesidad infantil y fomentar un desarrollo saludable, debemos ir más allá de prohibiciones generales y enfocarnos en educar sobre la verdadera alimentación nutritiva. De lo contrario, podríamos estar reemplazando un problema con otro. ¿Qué opina usted especialista de la nutrición?

Nora Sevilla
Comunicadora y periodista experimentada, actualmente Jefa de Comunicación en Cd. Juárez del Instituto Estatal Electoral y Tesorera en la Asociación de Periodistas de Ciudad Juárez. Experta en marketing político y estrategias de relaciones públicas, con sólida carrera en medios de comunicación.