¡Qué calor hace! Se escucha decir por todas partes. Y con razón, el verano ha dado inicio en nuestra zona desértica. Sólo que desde el final de la primavera ya se “sentía” venir.
El consumo de agua y energía eléctrica aumenta igual que el calor. Las paraestatales no se dan abasto ante la demanda que la comunidad hace.
Apenas amanece y tenemos 25, 26 grados centígrados. La gente se protege del golpe de calor. Los medios de comunicación nos previenen el mismo.
Tome mucha agua. Protéjanse del sol. Son las recomendaciones que vemos y escuchamos. Y esto apenas empieza.
Según el Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), “61.6 por ciento del territorio nacional presentaba sequía y se encontraba anormalmente seco.
Al corte del 31 de mayo, última actualización del Monitor, mil 529 municipios, de los dos mil 471 con los que cuenta México, presentaban alguno de los cinco niveles de falta de agua.
Las entidades más afectadas son Oaxaca, Jalisco, Estado de México, Puebla, Chiapas y Michoacán, eso sin contar la ola de calor de las últimas dos semanas, y que según la UNAM, se prolongará en lo que resta de junio”.
Y aunque el monitor no menciona a Ciudad Juárez, es un hecho que tenemos problemas en el abastecimiento de agua.
La J+, se ha preparado con base a la experiencia de pasado verano. Hemos rehabilitado tres tanques de almacenamiento en diferentes partes de la ciudad.
Al noroeste, el Felipe Ángeles, al suroriente, el Portal del Roble. Y otro más al norte, el tanque Loma de Poleo.
Se han perforado tres nuevos pozos. Y se ha puesto en operación una nueva garza, que es donde se abastecen las pipas. Esto también la norte de la ciudad.
La garza disminuirá el tiempo de carga y entrega ya que se localiza cerca de uno de los mayores consumidores de agua en pipa. Y por si esto fuera poco, se adquirieron nueve pipas para agregarlas a las existentes.
La J+ se ha preparado para el verano de la mejor manera posible. Pero no para un calor atípico, como el que se está experimentando en la actualidad.
Las temperaturas que nos abrazan se sienten en todo el territorio nacional y en gran parte del mundo. Es por el calentamiento global del planeta.
La demanda de agua en los hogares se ha duplicado, en el mejor de los casos. Y es un hecho, el agua faltará sólo por ese hecho. Porque no se tiene la manera de satisfacer la demanda al 100%. No se tiene el número de pozos necesarios, ni la infraestructura instalada. Es ahí cuando todo se combina y se habla del estrés hídrico. La demanda es mayor que la oferta.
Ante lo atípico, nadie puede prepararse de total manera.
Mientras escribo, la ciudad está sufriendo de “apagones” en varias partes de la ciudad. La CFE se ve sobrepasada por la demanda de energía eléctrica. Lo que provoca que sus transformadores “truenen”. ¿Qué tiene que ver con la dotación de agua?
Los pozos donde se extra el líquido son eléctricos. Al fallar la electricidad, se detienen. Así que de igual manera como se afecta a los hogares, al comercio y a la industria, la J+ se ve afectada.
Son causas atípicas y ajenas a la CFE, a la J+, sin embargo todos sufrimos por la falta de estos recursos.
Sabemos que el calor no va a disminuir. Serán tres meses de intenso clima que demandará que todos hagamos un buen uso del agua y de la energía eléctrica.
El país entero sufre esta ola de calor atípica. Hay que enfrentarla y tratar de que no nos afecte en la salud y en el ánimo.
Sabemos que, tanto la CFE como la J+, hacen lo posible porque no fallen los planes, lo previsto y la entrega del suministro que cada ente entrega a la ciudadanía, a los usuarios.
Daniel E. Valles
Periodista y comentarista de radio y televisión. "El Meollo del Asunto" y "La Familia es Primero" son sus principales herramientas periodísticas que se publican en medios impresos y digitales en diversas geografías de habla hispana.
Ha sido merecedor de diversos reconocimientos como conferencista y premios de periodismo, entre ellos, la prestigiosa Columna de Plata, que otorga la Asociación de Periodistas de Ciudad Juárez.