Inicia la recta final de la lucha por la silla del águila y por los demás cargos de elección popular que se disputan a lo largo del país. Cada región vive un contexto diferente, pero es de llamar la atención el cierre de las preferencias en Estados importantes en cuanto a su alta población o a su condición de bastión político de alguna de las fuerzas en pugna.
Referente a la elección presidencial, las mediciones disponibles muestran una ventaja para la candidata de la coalición oficialista de MORENA -PT-VERDE; si bien estos datos deben de ser tomados con la cautela que implica la difusión de las encuestas electorales, la tendencia de todas estas coincide en que Claudia Sheinbaum sigue arriba en la intención de voto.
La Dra. Sheinbaum evita en lo posible hacer aspavientos y ha sorteado los daños que buscan causar los misiles de la oposición contra los flancos débiles del gobierno lopezobradorista como los son el tema de la seguridad, la salud y las fallas o supuestos actos de corrupción en las obras emblemáticas del sexenio en curso.
El mesurado papel de la ex jefa de gobierno de la Ciudad de México busca dar la percepción de que la elección está resuelta en su favor, sus mensajes concretos y claros en la campaña de “aire” si bien no entusiasman a nadie, si tienen verificativo en la campaña de “tierra” donde se apuesta a la movilización del voto duro morenista.
La campaña de la oposición parece que logrará contener el llamado “Plan C” del bloque oficialista, la coalición del PAN-PRI-PRD espera traducir el creciente descontento ante el problema de la inseguridad y de otros temas coyunturales en un resultado mucho más equilibrado en la cámara de diputados en comparación al 2018.
La candidata Gálvez ha recorrido un camino cuesta arriba que le da el mérito de ser, como todo indicaba, la única oponente real a las intenciones de continuidad del oficialismo.
Por otra parte, la Ciudad de México resulta en una tendencia de voto cada vez más cerrada entre MORENA y el PAN, la coalición opositora en este caso ha puesto toda la carne en el asador y parecen dispuestos a arrebatarle a la izquierda su histórico bastión, formalmente en poder de las llamadas fuerzas progresistas desde 1997.
La batalla por la CDMX se está dando y la izquierda ha respondido con la difusión del llamado “cártel inmobiliario”, uno de cuyos supuestos integrantes es el candidato de la oposición.
Dicha campaña es motivo de controversia dadas las resoluciones del Instituto Electoral local que han ordenado a la coalición oficialista a abstenerse a utilizar tales mensajes.
Veremos si el desgaste de casi tres décadas de gobiernos emanados de la izquierda y la marginación para este cargo de su aspirante mejor posicionado trae nuevos aires a la CDMX o si la organización territorial y la veta anti prian de los capitalinos le dan al morenismo su segundo mandato consecutivo.
Otro Estado que ha entrado en competencia es Veracruz, cuya candidata morenista es objeto de duros cuestionamientos en cuanto a su estilo de vida y supuestas propiedades millonarias. Nada anormal tratándose de campañas políticas y de la lucha por el poder.
Tampoco el gobierno veracruzano actual se ha caracterizado por ser de lo más eficiente y la aprobación de su gobernador nunca fue la mejor. Así que de menos a más se estarían dando las condiciones para un voto veracruzano diferenciado que poco a poco da esperanza al bloque opositor de recuperar o sentar las bases para recuperar para el priismo uno de los territorios más ricos del país.
Por ahora finalizaremos con el Estado de Yucatán. Aquí se ha abierto la competencia en desafío al panismo gobernante, algo interesante puesto que el actual gobernador se ha mantenido como uno de los mandatarios estatales mejor evaluados, con alta aprobación prácticamente durante todo su periodo.
Si bien podría decirse que Yucatán es un Estado con fuertes sectores de raigambre conservadora, la realidad es que la gestión del gobierno federal no es tan mal vista. Proyectos como el tren Maya tienen aceptación entre los yucatecos y el mismo gobernador es visto como un aliado institucional del presidente de México.
A esto podemos sumar la adhesión de actores y estructuras priistas a MORENA que no se han sentido realmente incluidas en las definiciones de la coalición encabezada por el PAN para los espacios a elegir en este Estado.
A prácticamente un mes de la elección, no podemos hablar aún de sorpresas, pero sí existen factores que podrían posibilitar el cierre de las preferencias electorales en varios casos. La lucha por el poder se acentuará en el ámbito local.
“Confía en el Señor de todo tu corazón y no confíes en tu propio entendimiento; reconoce al Señor en todos tus caminos, y él enderezará tus caminos”.
(Proverbios 3:5-6)
Moisés Hernández Félix
Lic. en Administración Pública y Ciencia Política, candidato a Maestro en Administración en curso. Ha sido funcionario público federal y docente en nivel media básica y medio superior. Se especializa en gobernanza educativa y políticas públicas.
Las opiniones expresadas por los columnistas en la sección Plumas, así como los comentarios de los lectores, son responsabilidad de quien los expresa y no reflejan, necesariamente, la opinión de esta casa editorial.
