Un sistema de dos hoyos negros súper masivos con una cercanía inusual entre ambos fue descubierto este 2021, de acuerdo con una investigación publicada en la revista especializada Astronomy and Astrophysics.
Moscú (Sputnik) – “Este descubrimiento es el primer sistema dual de hoyos negros súper masivos confirmado dinámicamente con una separación proyectada de menos de un kiloparsec”, afirma el artículo astronómico con la firma de 10 científicos.
Además, constituyen la pareja de agujeros negros súper masivos más cercana a la Tierra jamás observados, según información del Observatorio del Sur de Europa (ESO, por su sigla en inglés), en cuyo instrumental de observación astronómica se desarrolló la investigación.
Un kilopársec equivale a una distancia de 3.000 años luz y el sistema de hoyos negros se ubica en la galaxia NGC 7727, de la constelación de Acuario, a unos 23,3 megapársecs de la nuestra, la Vía Láctea, detalla el estudio. Un megapársec implica una distancia de alrededor de 3,26 millones de años luz.
“Muchos hoyos negros súper masivos existen fuera de los centros de las galaxias que aún no han sido descubiertos”, permite concluir este descubrimiento, señalaron los investigadores en sus conclusiones.
Actualmente, la única manera de encontrar estos hoyos negros ocultos es la búsqueda de cúmulos estelares nucleares sobrevivientes de galaxias en expansión, estimaron.
“El segundo núcleo en NGC 7727 es un objeto incluso más interesante debido a su pequeña separación del principal hoyo negro súper masivo en el centro de NGC 7727 y su avanzado estado de fusión”, agregaron.
Este descubrimiento casual de un sistema dual de hoyos negros permite primeras comprensiones de separaciones de hoyos negros menores a un kilopársec, apuntaron los científicos, lo que permite pensar que existen más de estos sistemas en el universo local.
“Enfocarse en brillantes cúmulos de estrellas nucleares sobrevivientes en galaxias fusionadas puede facilitar el descubrimiento de separaciones en el universo local de hoyos negros súper masivos duales incluso cuando no sean luminosos núcleos activos de galaxia”, indicaron.
Los autores del artículo consideraron que las capacidades telescópicas de observación actuales dificultan un poco estas comprensiones, pero que la situación mejorará con el arribo de telescopios de la nueva generación.
Debido a que los hoyos negros son completamente oscuros, sus colisiones son invisibles a los telescopios y otros instrumentos de detección de luz utilizados por los astrónomos, señala un artículo de divulgación de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por su sigla en inglés) del Gobierno de Estados Unidos.
“Sin embargo, teóricos han generado ideas acerca de cómo la fusión de un hoyo negro podría producir una señal lumínica mediante la provocación de irradiación en material cercano”, agrega la institución espacial.
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